31/12/20

My Uni Life: 5.8

¡Hola! Aún me quedan algunas semanas que contar sobre mi quinto semestre, así que por lo menos escribiré una vez más antes de que acabe el año. Por ahora continuemos con la semana 8 y mi intento por crear una rutina durante el Lockdown 2.0.

Lunes. Me pasé todo el día en mi casita, haciendo la tarea para la clase del día en la mañana. Luego estuve escribiendo, lavé mi ropa, y en la noche hice una sesión de self-care con un buen baño y mascarilla.

Martes. Probé la app de Starbucks para pedir mi café Mocha (que ahora ya me gustó) por adelantado y nada más pasé a recogerlo. Me senté como media hora en el parque Weston antes de mis dos clases del día para aprovechar lo que parecía ser el último día de clima decente de la temporada, hasta me tocó un poco de sol. En la tarde por fin me inspiré lo suficiente como para terminar y entregar mi ensayo de Prosa Romántica, y con eso me quité un gran peso de encima.

Miércoles. Tuve la última sesión de reflexión sobre el evento de networking de la semana anterior. Justo antes de la sesión bajé a comer lunch y resultó que un gatito decidió visitarnos. No fue tan amigable como los otros porque no dejó que nadie lo tocara, aún cuando le di un poco de jamón, pero no me pude quedar mucho tiempo.

Jueves. Salí con mi amigo #1 porque ya tenía tiempo sin verlo, o sea más de una semana. Por fin saqué mi abrigo de invierno del clóset porque ahora sí empezó la temporada de frío en serio. Nos sentamos a congelarnos y comer un sándwich de Subway en el parque Devonshire Green. Luego fui por una dona al recién abierto local de Dunkin Donuts. Aprovechando que ya andábamos por ahí, fuimos a un café por unas bebidas calientes y nos quedamos otro rato en los Peace Gardens. Como ya había oscurecido y hacía demasiado frío, preferí regresar a mi casa en camión. Llegué justo a tiempo para un taller en línea de Escritura Creativa organizado por las Bibliotecas de Sheffield. Seguido hacen talleres pero casi siempre son de poesía y eso no se me da tanto, así que esta fue la primera vez que me uní a uno de esos. Me enteré de que hay toda una comunidad de escritores en la ciudad y pues ahora trataré de asistir a más clases.

Viernes. Me pasé toda la mañana en preparándome para ir a la tienda. Ya más tarde me metí a una clase de yoga pero me rendí a la mitad porque sigo sin ser lo suficientemente flexible como para seguir los ejercicios. Me pasé la tarde hablando con mis papás y luego armando el rompecabezas de Los Muppets que ya me gustó para hacer y deshacer porque solo es de mil piezas.

Sábado. Por fin me llegó una weighted blanket que pedí esa semana con la intención de que me ayude a dormir mejor y con menos frío. Ya reportaré si sí funciona, pero la primera noche sí me sentí aplastada. No me decidía si pedirla de 4 o de 6 kilos porque supuestamente debe ser el 10% de tu peso y yo estoy justo en 50 y algo, pero terminé eligiendo la de 6 y ahora no se si es demasiado para mí. Aproveché para limpiar mi cuarto, hacer un poco de tarea, y en la tarde pedí una súper hamburguesa de McDonald's para ver The Holidate y que me entrara un poco de espíritu navideño.

Domingo. Salí a caminar al jardín botánico y de compras a Ecclesall Road. En la tarde estuve haciendo más tarea y también escribí un poco para el blog. Para terminar la semana de nuevo hice noche de self-care con un baño relajante y una mascarilla.

No se por qué me tomo tanto tiempo haciendo actividades "relajantes" como yoga y poniéndome mascarillas porque no es que haga tanto durante la semana pero bueno, hace falta de vez en cuando. En fin, con esto me despido y aprovechando les deseo una feliz navidad atrasada y un buen año nuevo, o al menos que sea mejor que el 2020. ¡Hasta pronto!

23/12/20

My Uni Life: 5.7

¡Hola! He estado descansando mucho esta última semana pero por fin voy a ponerme a hacer algo productivo. Así que comencemos con las aventuras del Reading Week, la semana de descanso (todavía más descanso) a medio semestre. 

Lunes. Terminé el libro que estuve leyendo el fin de semana anterior, The Manifesto on How to Be Interesting. Sigue pendiente la reseña, pero es un libro que por años estuvo en mi lista para leer hasta que por fin lo encontré en una charity shop. Terminé y entregué mi ensayo de Poesía Romántica a pesar de que ya no sabía que más poner y apenas alcancé el mínimo de palabras. En la tarde pedí una hamburguesa con su respectiva malteada para celebrar.

Martes. Fue un día de flojera total que aproveché para organizarme: acomodé las notas de mis clases, escribí para el blog, y estuve jugando a mover los muebles de mi cuarto.

Miércoles. Tenía meses que no me paraba tan temprano, pero me propuse salir por un café al Costa que está cruzando la calle para que me ayudara a despertar. Nunca olvidaré la cara de sorpresa de mi homie #2 cuando pasé por la sala a las 8 de la mañana. La razón fue porque todo el día estuve en talleres y pláticas de un evento de networking, de 9 de la mañana a 5 de la tarde. Estaba muy nerviosa y terminé muerta de cansancio, pero todo salió bien para ser la primera vez que hacía algo así. Sigo sin tener mucha idea de qué hacer después de graduarme, pero de algo sirvió. Después de cenar, reacomodé mis muebles porque había movido el escritorio para tener un fondo decente y que no se viera mi cama, mis posters, o la ropa tendida en el calentador. 

Jueves. Se me olvidó que prometí despertarme temprano para una cita médica por teléfono, así que me despertaron a las 9:50. Eso fue lo más interesante del día, porque me la pasé descansando.

Viernes. Pedí un paquete para preparar mi propio "currywurst" del mismo que probé la última vez que fui al Peddler's Market. Hay que admitir que me salió muy bien. En la noche tuve la primera junta de la sociedad a la que me uní hace unas semanas, y la verdad me cayeron muy bien aunque nunca prendí mi cámara porque estaba disfrutando mi cena con una cervecita. Más tarde, volví a ver la serie Control Z otra vez de nuevo. 

Sábado. Estuve todo el día tratando de dedicarme a escribir mi ensayo de Prosa Romántica como hice la semana pasada con el de poesía, pero mi cerebro no cooperó, y al parecer se quedó apagado hasta el lunes porque no tengo ni idea de que hice ese domingo fuera de ir a la tienda porque ya no tenía comida.

Creo que este semestre me está costando todavía más trabajo concentrarme en las clases (como creo que a mucha gente también le ha pasado), aunque por suerte no tengo tantos tareas o proyectos que entregar hasta el final del semestre, así que mientras no me voy a preocupar. 

11/12/20

My Uni Life: 5.6

¡Hola! Ya que estoy más o menos adaptada e instalada de vuelta en México, puedo escribir a gusto y seguir actualizándolos con mis aventuras británicas. Así que comencemos de una vez con la historia de cómo sobreviví el fin de semana anterior.

Lunes. Estaba muerta y con ganas de dormir todo el día pero mi homie #2 me despertó a las 10 porque se le ocurrió ponerse a aspirar la sala porque iban a venir a revisar la casa. Sí me enojé, y todavía él me reclamó por dormir tanto. En un intento por mantenerme despierta me bañé en la mañana y apenas me dio tiempo de ver 1 de 3 videos para mi clase del día porque los subieron el día anterior. Además casi me quedo dormida durante la clase, lo cual no tuvo nada que ver con que estuviera en mi cama. En la noche todavía tuve una junta para un nuevo proyecto con varias sociedades Latinoamericanas en Inglaterra, y después de eso por fin pude dormir a gusto.

Martes. Otro día que estuve en modo zombie pero pues tuve que salir a mis clases y luego a la tienda. En la noche pasé a saludar a mi amigo #1 a su trabajo porque él me dijo, pero resultó que andaba muy ocupado y solo me comí una rebanada de cheesecake mientras lo veía dar vueltas e ignorarme. Al menos el pastel estuvo bueno.

Miércoles. Me volvieron a despertar en la mañana, pero esta vez fue mi homie #1 gritándole a mi homie #2 desde la cocina hasta su recámara en el tercer piso. Si quieren ser buenos housemates, no hagan eso. En la tarde tuve una sesión de preparación para un evento de la universidad de networking al que me inscribí. Estaba bastante nerviosa pero la peor parte fue la semana siguiente, ya les contaré cómo fue.

Jueves. Me desperté hasta la 1:30 porque por fin no tuve responsabilidades en todo el día. Fui al parque Crookes Valley a practicar en la patineta con mi amigo #1, aunque ya había gente de la sociedad en el parque y nos dio pena porque seguimos siendo principiantes, así que más bien sacamos a pasear a nuestras patinetas. Fuimos a comer al parque Devonshire Green más cerca del centro, aunque como justo este día comenzó el Lockdown 2.0, solo pudimos pedir comida para llevar y congelarnos en el parque mientras comíamos, porque también fue de los primeros días en los que la temperatura no pasó de 10 grados. Al final casi tuvimos que salir corriendo porque resultó que había ratas atrás de nosotros en la jardinera donde nos habíamos sentado y pues sí nos asustaron.

Viernes. Me pasé la mañana escribiendo y preparando el blog, y más tarde solo estuve haciendo el trabajo que había estado evitando como revisar emails y esas cosas aburridas. Luego de una siesta, me puse a preparar mi nuevo experimento de comida. Usé la receta del restaurante donde trabajo para preparar unos taquitos de bistec, y hubieran visto qué buenos me salieron. 

Sábado. Me pasé casi todo el día leyendo un libro por gusto (tal vez después escriba una reseña) en lugar de uno para mi curso, pero al menos no perdí el tiempo. En la noche me dieron ganas de acomodar mi vida, o por lo menos mi cuarto, así que organicé lo más que pude, puse mi ropa a lavar, y hasta aspiré mi alfombra.

Domingo. Un clásico día británico de otoño, con menos de 10 horas de luz del día, todo completamente gris, con mucha niebla y en general algo triste. Me la pasé aburrida trabajando de poquito en poquito en mi ensayo de Poesía Romántica, leyendo, y viendo los videos de mis clases.

Y pues sí. De verdad esperaba poder pasar más días tirada en mi cama recuperándome, pero la mitad del semestre es un periodo agitado y apenas pude dormir decentemente. En fin, con el anuncio del nuevo Lockdown resultó que ya no pude trabajar más que una sola vez porque cerraron los restaurantes que no tuvieran servicio para llevar; aunque las clases presenciales continuaron, por alguna extraña razón. Lamentablemente ya que estaba haciendo más frío y con todos los lugares cerrados, me la pasé encerrada casi todo el mes siguiente, lo cual era claramente el plan del gobierno pero se sintió más feo que la primera vez. En fin, eso no significa que no hice nada durante todo ese tiempo, pero ya les iré contando. Sin más que agregar por el momento, ¡nos vemos!

28/11/20

My Uni Life 5.5

¡Hola! Hoy toca contar una de las semanas más ocupadas y extrañas de lo que llevo en la universidad. O al menos de lo que va del año con todo y pandemia, porque seguro ya olvidé mucho del primer año. En fin, comencemos.

Lunes. Me bañé en la mañana principalmente para ponerme una mascarilla en el cabello y que tuviera todo el día para secarse, pero también para no congelarme en la noche. He estado peleando con mi homie #2 porque a mí me gusta cerrar la ventana del baño para que no entre el aire, pero él la había estado dejando lo suficientemente abierta para que yo no alcanzara a cerrarla. Y como normalmente me baño en la noche, ahora se la cambié. Pero bueno, en la tarde se me ocurrió ir al Costa Coffee enfrente de mi casa por un café para entrar en modo Godín y ponerme a trabajar. Cabe aclarar que no me gusta el café, pero probé el mocha y me gustó, aunque estuve mucho más activa de lo normal por los siguientes 3 días. No me pude conectar a la clase en línea porque la conexión estuvo fallando y a los 20 minutos me rendí y le mandé un mail a la maestra de que me disculpara. Cené rápido y luego me preparé para la caminata de casi 40 minutos al restaurante donde ahora voy a trabajar. Este día solo fui por dos horas al entrenamiento, pero sí estuvo cansado.

Estuve de mesera atendiendo a amigos y familiares que vinieron a la prueba, por lo que la comida fue gratis en lo que todos descubríamos cómo funcionaba todo. Mi amigo #1 y yo habíamos discutido mucho sobre poner un restaurante con auténtica comida mexicana, que tanta falta hace por acá, pero mi ahora jefe nos ganó la idea y le salió mucho mejor porque nosotros ni siquiera sabemos cocinar. Está difícil de explicar porque no es un restaurante en sí, sino que solo vamos a servir comida mexicana los domingos en un local prestado. Mi amigo #1, a quien le encanta quejarse de la comida mexicana fuera de México, no pudo ir a probar porque le tocó trabajar pero creo que sí se va a emocionar cuando vea el menú. Ahora sé que no soy tan mala mesera, pero todavía falta arreglar muchas cosas. Por suerte de regreso mi nueva compañera de trabajo me invitó a compartir su Uber a medio camino y sólo tuve que caminar otros 15 minutos antes de desplomarme en mi cama.

Martes. Desperté temprano para arreglar el desastre que dejé luego de llegar casi a las 11 de la noche a mi casa la noche anterior y sin ganas de nada. Salí a mis clases del día que se trataron de un writing retreat, o sea un "retiro" para concentrarnos en analizar los textos que vamos a usar para los ensayos de mitad de semestre. Ya para la segunda hora mi cerebro se había quedado sin ideas, pero sí fue muy útil para adelantar trabajo.

Miércoles. En la mañana volví a ir a la bodega de la Sociedad Latinoamericana pero esta vez con los otros miembros del comité para sacar la mayor cantidad de cosas de la bodega antes de que la cerraran y tiraran todo. Más tarde tomé una clase de yoga en línea aunque no logré hacer la mitad de ejercicios por mi falta de flexibilidad. En la noche, mi amigo #1 vino a mi casa a recoger su patineta y nos quedamos un buen rato compartiendo nuestras "patoaventuras de meseros" (nombre oficial de la nueva sección) como principiantes que somos, a pesar de que yo ni siquiera había trabajado oficialmente. 

Jueves. Me pasé todo el día preparando el evento de la Sociedad Latinoamericana para hacer decoraciones de Día de Muertos, practicando antes de dar la clase. Para terminar el día, puse Sweeney Todd (100% recomendada) para seguir en el mood de Halloween, y me entretuve haciendo tiras de papel picado para colgar en mi casa. Si hubiera colgado todo lo que hice, hubiera dejado la casa como restaurante de La Marquesa.

Viernes. Fui a comer lunch con mi amigo #1 a Church un día antes de Halloween para probar el menú especial y porque ya no reservamos a tiempo para ir el mero día. Intenté disfrazarme de Merlina de Los Locos Addams pero sin llamar mucho la atención; por lo cual solo me veía un poco más gótica de lo normal, y todos en el restaurante se veían igual. Además llegué unos minutos tarde porque me encontré un gato en la calle que no me dejaba ir y me vi obligada a quedarme a acariciarlo un rato. En la tarde entré en modo responsable y me puse a trabajar lo más que pude para adelantar tareas de la semana siguiente porque sabía que el fin de semana iba a estar muy ocupada.

Sábado. No salí pero tampoco pude trabajar porque no subieron los videos que tenía que ver de 2 materias. ¿Y así como quieren que haga algo? Luego de la cena, pasé al trabajo de mi amigo #1 y nos fuimos caminando a su casa para una "fiesta" de Halloween (solo él con sus homies y yo de colada). Lo que no me avisaron fue que la mitad de la fiesta iba a ser poniéndose sus disfraces, para lo cual yo me quedé sin nada que hacer porque ni siquiera me pude disfrazar bien para que mis homies no supieran que me escapé de la casa.

Domingo. Salí bien temprano a pesar de la desvelada a trabajar desde las 9 en punto para decorar el restaurante con otro montón de papel picado. Estuve alrededor de 5 horas dando vueltas sirviendo desayunos sin haber desayunado más que un pobre pan y un café helado de Starbucks comprado en el súper. Hasta eso no estuvo tan feo, pero apenas éramos dos meseras para como 12 mesas. Para ser el primer día del restaurante, nos fue muy bien. Mi amigo #1 llegó a comer justo a la hora del cambio del menú de desayuno a cena y a mi hora de salida, así que metí la orden para unos taquitos y me senté con él a comer. Él probó pollo con mole y otra cosa que no me acuerdo, y yo comí papa con chorizo; y estuvo buenísimo. Terminé de regreso en su casa (porque quedaba más cerca) para ver el Desmuerto Reanimado del podcast de Leyendas Legendarias, aunque estábamos tan cansados que apenas logramos mantener los ojos abiertos durante el evento. Regresé a mi casa bien tarde y totalmente muerta, lista para pasar la siguiente semana sin salir de mi cama.

Tenía tiempo que no me tenía que levantar temprano tantos días, pero creo que quitarme la flojera desde temprano sí me ayudó para ponerme a trabajar, aunque nada más de acordarme de todo lo que hice me volví a cansar. Sin nada más que agregar por el momento, porque este post sí quedó algo largo, me despido por ahora. ¡Hasta pronto!

22/11/20

My Uni Life: 5.4

¡Hola! Aprovechando el tiempo libre que tengo hoy para hacer algo más que ver películas o escuchar música, continuaré con las historias semanales, y ahora toca una semana con mucho trabajo, y el comienzo de la locura antes de volver al confinamiento. Pero bueno, comencemos.

Lunes. Fueron las votaciones para la sociedad que apoya la salud mental en la universidad. Se me ocurrió postularme unos días antes como Representante de Estudiantes Internacionales y resultó que gané a pesar de que sí había competencia y de que ni siquiera le avisé a nadie de mis conocidos que me había inscrito. Ahora tengo un trabajo más, por si no tenía suficiente que hacer. Este día también empezaron los problemas reales con el micrófono de mi computadora. Ya llevaba tiempo fallando y tampoco funcionaban mis audífonos con micrófono. Compré unos de Bluetooth en caso de que la entrada de audífonos fuera el problema, pero no se han querido conectar. Así que dependo completamente de la paciencia de mis compañeros que quieran esperar a que escriba mis respuestas para participar en clase. En la tarde me la pasé volviendo a armar el rompecabezas de la Noche Estrellada de Van Gogh que conseguimos el año pasado, nada más por no querer hacer algo relacionado con la universidad.

Martes. Luego de mis clases en la mañana, fui con mi amigo mexicano #1 a practicar con nuestras patinetas al parque Crookes Valley Park. No pasamos de ir por los senderos del parque ida y vuelta porque no sabemos hacer nada más, y aún así a él le cuesta trabajo irse derecho, pero está divertido. Ya que el clima estaba decente, aparecieron más personas de la sociedad de skateboarding de la universidad, por lo que todos tímidos y penosos, nos terminamos yendo para que no vieran la falta de talento que teníamos. Además empezó a llover, así que aprovechamos para huir. Pasé a dejar a mi amigo a su nuevo trabajo, que es un restaurante que queda a una cuadra de mi casa, aunque me dejó su patineta para no tener que llevársela a su trabajo o cargarla de regreso a su casa. Me pasé el resto de la tarde descansando y siguiendo con el rompecabezas, aunque estaba tan cansada que me terminé durmiendo a las 11 de la noche (eso ya es temprano para mí).

Miércoles. Lo más interesante del día fue que le pedí a mi amigo #1 que me acompañara a la bodega de sociedades para investigar qué había en el locker de la Sociedad Latinoamericana, que supuestamente teníamos que vaciar antes del primero de noviembre. No me llevé mucho porque ya tengo varias cajas de la sociedad en mi casa, pero salí con una caja de materiales para manualidades que con suerte serán útiles en un futuro.

El jueves fue un día muy aburrido, así que me voy a saltar al viernes, aunque tampoco hice mucho.

Viernes. Por fin terminé el rompecabezas con un poco de trampa considerando que había partes que estaban  casi completas porque cuando lo tuve que deshacer porque nos mudamos lo guardé por partes tratando de no separarlo demasiado, aunque sí se sacudió un poco con tanto movimiento. Para cenar, ordené una hamburguesa y malteada de mi restaurante favorito porque ya hacía falta. 

Sábado. Mi papá me estuvo ayudando por videollamada a intentar todo con tal de hacer funcionar los audífonos de bluetooth, con lo que después de varios intentos por fin logré que funcionara el micrófono. Ahora veremos si funcionan en clase. En la noche fui a ayudar a mi amigo #1 al restaurante donde trabaja porque supuestamente tenían muchas reservaciones y nadie más que él estaba disponible; así que fui por dos horas a ayudar a limpiar mesas y cargar platos. Estuvo divertido ver a mi amigo #1 en modo serio, y aunque al principio estaba bien nerviosa resultó que la mitad de personas que habían reservado no llegaron así no tuve que hacer mucho.

Domingo. Me di cuenta que había sido el cambio de horario en la noche hasta como mediodía que volteé a ver el reloj que tengo en mi cuarto y me di cuenta de que no coincidía con mi teléfono, si no yo ni enterada. La verdad no afectó en nada mi día, fuera de que me desperté todavía más tarde de lo normal. En la tarde volví a preparar las galletas de mantequilla que nada más no me salen, aunque esta vez estuvieron bastante buenas. Ya estoy cerca de descubrir el secreto, pero nada más no me termina de convencer el horno que tenemos. 

Y pues sí. Todavía durante esta semana estaba en un periodo de meterme a todas las actividades que pudiera para ocuparme lo más posible, no sé con qué objetivo. Ya les contaré como me va con todo, porque noviembre se puso muy interesante. En fin, esto es todo por hoy, y que les vaya bien esta semana. ¡Hasta luego!

16/11/20

My Uni Life 5.3

 ¡Hola! Es día de otro post mientras sigo inspirada para tratar de ponerme al corriente con las aventuras de este semestre. Creo que esta semana no estuvo tan interesante, pero no me la puedo saltar nada más porque sí. En fin, comencemos.

Lunes. Pasé todo el día en mi casita porque esta semana la universidad canceló las clases presenciales por tantos casos de COVID que se dieron por razones desconocidas (como obligar a los estudiantes universitarios a ir a clases presenciales). No es como que afectara mi única clase de los lunes que es en línea. 

Martes. De nuevo pasé todo el día en mi casa, y tomé mis dos clases del día en línea. En la tarde tuve lo más parecido a una entrevista de trabajo para ayudar en un nuevo proyecto como catering de comida mexicana. Lo vi muy conveniente porque nada más es un día a la semana, así que no sería tanto problema para adaptarme con mis horarios de la universidad. Ya les contaré más adelante cómo me fue en mi entrenamiento y primer (y único) día de trabajo. Y sí, estuve muy nerviosa pero salió bastante bien.

Miércoles. Estuve viendo videos de clases todo el día y para moverme un poquito me metí a una clase de pilates en línea. Me gustan más las clases así porque no es necesario prender la cámara por lo que no me pueden ver ya que estoy muy cansada. Además lo puedo hacer desde la comodidad de mi cuarto y sin tener que caminar por la ciudad en el frío y en la oscuridad. Intentaré tomar más clases de ejercicio en lo que empiezan los entrenamientos de volley, si es que algún día empiezan. 

Jueves. De nuevo me pasé el día viendo videos de clase aunque con un pequeño grave problema con mi computadora. Resultó que después de dejarla toda la noche actualizándose, una vez que por fin prendió las bocinas no quisieron funcionar. Por alguna extraña razón la entrada de audífonos sí funcionaba, pero las bocinas se negaron. Por lo tanto tampoco pude ver series o una película en la noche, pero eso fue lo menos grave.

Viernes. Mágicamente se arregló mi laptop con otra actualización luego de tenerme sufriendo todo el día anterior, pero pues no me voy a quejar de eso. En la noche me dio flojera cocinar, y como tenía tiempo sin ordenar comida, pedí unas papas a la francesa con topping de chili con carne. Tenía antojo de probarlas desde hacía tiempo pero no lo hice hasta que me apareció un nuevo descuento de Uber Eats y tuve que aprovecharlo. Estuvieron bastante buenas aunque me estaba muriendo con el picante.

Sábado. Creo que no me levanté en todo el día más que para comer. Me pasé todo el día leyendo la versión de Frankenstein de 1818 porque necesitaba leer esa edición específicamente para mi clase. Y para terminar de descansar con mi ritual de self-care, me bañé y me puse una mascarilla en el cabello (muy recomendada si se pintan el cabello seguido).

Domingo. Salí a caminar y a hacer el súper al área de Crookes para hacer un poco de ejercicio (pero sin cansarme demasiado) y para cambiar de ambiente un poco. Ahora hay 3 tiendas que me quedan cruzando la calle, pero de vez en cuando me gusta cambiar la rutina, aunque sea solamente cambiar la tienda a la que voy a hacer mis compras de la semana. En la tarde terminé de leer Frankenstein, el cual cambia de significado bastante una vez que lo lees sabiendo todo el contexto de la época. Finalmente terminé la semana viendo aun más videos de clases y con la película Kick-Ass porque tenía tiempo que no veía algo moderno. 

Prometo hacer cosas más interesantes en el futuro, y también que hice cosas más interesantes en las semanas pasadas. Como dije al principio, no podía olvidar esta semana. Pero bueno, sigo tratando de entretenerme en esta nueva cuarentena aunque debería estar haciendo tareas y demás. Aun así espero actualizar el blog pronto con mis experiencias tratando de trabajar y estudiar en medio de una pandemia. Ahora sí me despido, ¡hasta pronto!

11/11/20

My Uni Life: 5.2

¡Hola! Aprovechando que estoy inspirada para escribir y que tengo un poquito de tiempo libre, continuaré con lo que hice la segunda semana del semestre. Sin nada más que añadir, comencemos con la segunda semana mientras me seguía adaptando a volver a tener que trabajar luego de casi 4 meses sin nada que hacer.

Lunes. No salí en todo el día y me pasé toda la mañana descansando. Tuve una clase a las 3 y por primera vez fallaron mis audífonos por lo que no pude participar. Hasta la fecha (casi un mes después) no lo he podido solucionar, pero después les contaré todo lo que he intentado. En la noche estaba tranquilamente viendo Addam's Family y tejiendo, y ya casi al final se fue la luz y sí entré en pánico porque era casi media noche, mi celular tenía poquita batería, y no tenía más que dos pobres velitas. La oscuridad no duró más de 5 minutos, pero sí me asusté, y en cuanto volvió me apuré a apagar todo y me dormí.

Martes. Me confundí horrible con el orden de mis clases y los libros que debía leer porque la profesora de una materia decidió atrasar los temas una semana para no tener que trabajar los fines de semana, y asumí que el profesor de mi otra materia de literatura haría lo mismo. Pero resultó que no, y tuve que leer el resumen del libro de la semana mientras explicaba la actividad para pretender que sabía de lo que estaba hablando. Sobreviví diciendo "sí, estoy de acuerdo" aunque me sentí mal. Regresé a mi casa en medio de la lluvia, solo para que se quitara poco después de que llegué. Luego me dormí un ratito para que se me pasara el susto y en la noche vi Addam's Family Values; la cual recordaba haber visto pero no tenía memoria de la parte del campamento de verano más que por memes más recientes. Pero está buenísima.

Miércoles. Me tuve que quitar la flojera para salir a la tienda porque de plano ya no tenía nada para comer, y en un nuevo experimento para mejorar los fideos instantáneos estilo Maruchan, les puse un huevo cocido para que se viera estilo ramen por recomendación de mi amigo mexicano #1. No está nada mal, y no se por qué nunca se me había ocurrido agregarle cosas a los fideos. En la noche volví a ver The Dirt porque ya tenía más de 3 semanas que no la veía, hehe.

Jueves. Otro día aburrido y sin salir. Me la pasé viendo las clases para la siguiente semana, al menos los que ya habían subido. En la tarde después de cenar, fui a Interval (el restaurante de la universidad) en un intento por revivir la Sociedad Latinoamericana a pesar de la pandemia, pero solo me quedé unas horas platicando con un amigo porque nadie más apareció. Al menos ahora sabemos qué no hacer. Y como ni siquiera supe qué hice el viernes, continuaré con el fin de semana.

Sábado. Fui a comer con amigo mexicano #1 a Peddler's Market en Kelham Island. Me cumplió el capricho porque desde hace mucho tenía antojo de salchichas alemanas y ese fin de semana estuvo un puesto que tenía bradwurst y currywurst. A pesar del frío, la comida estuvo buenísima y como punto extra nos tocó sentarnos junto a una pareja que llevó a un cachorrito muy juguetón que pude acariciar y hasta me lamió la mano. No se preocupen, llevaba gel antibacterial. Después fuimos por un chocolate caliente para dejar de temblar y sin más que hacer y siendo temprano aún, fuimos a un "mercado" (tienda) de cosas usadas. A mi amigo #1 le encanta ir nada más a ver a tiendas vintage, pero ya van dos veces que veo chamarras que me gustan para mí, pero que son de su talla y él se las termina comprando. 

Originalmente habíamos planeado regresar a mi casa a ver un concierto en línea por el Día Mundial de la Salud Mental, pero mi amigo me abandonó en Kelham Island porque estaba muy cansado por haber trabajado en la mañana desde temprano. Tuve que regresar a mi casa sola, en la lluvia, con los pies adoloridos por los zapatos de plataforma que llevaba, y sin música porque no llevaba audífonos. En la noche vi el concierto mientras armaba el rompecabezas de los Muppets que la mamá de mi homie #1 nos regaló para que armáramos todos juntos pero que me terminé adueñando. Es su culpa por dejarme sola con un rompecabezas.

Domingo. Por fin llegó el día de las pruebas para entrar al equipo de volleyball. Elegí el último horario para pruebas de mujeres en caso de que me despertara tarde, aunque para las 3 de la tarde estaba perfectamente despierta. Hubo menos gente que en la mañana y me tocó casi con puras principiantes, así que a comparación sí jugué muy bien. Para compensarme por cancelar el plan del sábado a último minuto, mi amigo #1 fue a cenar a mi casa luego de ir a las pruebas, para la cual también eligió el último horario para hombres, que también fue la última prueba del día terminando a las 8pm. Pedimos pizzas de pollo y chorizo (100% recomendadas) mientras escuchamos un episodio de Leyendas Legendarias (también recomendado).

Y pues sí. Ahora que lo pienso, extraño un poco las primeras semanas en las que todavía no tenía idea de qué estaba haciendo pero no había problema porque no era tanto con lo que debía ponerme al corriente. Ya voy a medio semestre y todavía no sé qué estoy haciendo, aunque ahora sí es medio problemático porque ya estoy teniendo que entregar ensayos y empezar proyectos finales. Ahí voy, poco a poco. En fin, esto es todo por hoy, y ya me voy a poner a trabajar en lo que debería priorizar. ¡Hasta pronto!

6/11/20

My Uni Life: 5.1

¡Hola! Ya se que he tenido el blog un poquito olvidado, pero de por sí he tenido olvidado todas mis lecturas y el trabajo que debería estar haciendo para la universidad; así que no había sido una prioridad. En un esfuerzo por volver a tener orden en mi vida, y ahora que tengo una semana de descanso para ponerme al corriente con todo, por fin voy a empezar a contar mi quinto semestre (que ya va a la mitad). Sin más preámbulos, aquí van las aventuras del último año a media pandemia y crisis mundial.

Lunes. Honestamente no recuerdo bien qué fue lo último que escribí sobre el semestre en el post anterior, pero debido a que tengo todas mis clases en lunes y martes, tuve que empezar a trabajar desde el fin de semana viendo las lectures y haciendo las actividades para estar preparada para los seminarios. Un pequeño recordatorio de cómo funcionan las clases en Inglaterra: las lectures son pláticas en las que los profesores explican los temas y los estudiantes solo toman notas; mientras que los "seminarios" son clases más interactivas en las que los estudiantes discutimos y hacemos actividades relacionadas con los temas. Por lo tanto, este semestre todas mis lectures van a ser pre-grabadas y las puedo ver cuando quiera, y los seminarios van a ser en tiempo real, uno en línea y los otros dos en persona. Cabe mencionar que solo tengo 3 materias, por lo que tengo una clase en vivo por materia y todo lo demás es mi responsabilidad. Es decir, quién sabe cómo me va a ir.

Entonces, en la mañana del lunes estuve terminando los ejercicios para la única materia opcional que tengo, que es TESOL, o sea Introducción a la Enseñanza del Inglés para Hablantes de Otras Lenguas, o algo así. Por eso lo dejamos en TESOL. Hasta eso me fue bien porque la clase es hasta las 3 de la tarde y tengo toda la mañana libre. En cuanto acabó la clase salí corriendo al parque Crookes Valley porque el equipo de volley decidió aprovechar que salió el sol para jugar un rato. Siguiendo todas las medidas de seguridad, estuve jugando como 2 o 3 horas hasta que ya casi todos se habían ido. Pusieron una red en el pasto y estuvimos rotando en equipos de 3. Ya me hacía falta jugar con más personas, aunque sí estuve practicando en el verano con mi amigo mexicano #1. 

De regreso a mi casa pasé primero a la tienda para comprar lo que me faltó para preparar la cena y luego comí mi clásico salmón con salsa teriyaki, que es la única manera en la que sé preparar el salmón. Luego tomé un muy necesario baño y me pasé la noche viendo las lectures que me faltaron para el siguiente día.

Martes. Otro día de salir corriendo. Me costó trabajo levantarme "temprano", o sea a las 10am, para llegar a tiempo a mis clases de Poesía Romántica y Victoriana (o Poesía para los amigos) a mediodía y Prosa Romántica y Victoriana, también conocida como Prosa, a la 1pm. Cuando acabaron pasé por un frapuccino a Starbucks con la esperanza de despertar un poco pero no ayudó porque no lo pedí con café; porque nunca lo pido con café pero bueno. Después de regresar a mi casa a comer una rica sincronizada de lunch, volví a salir al parque Crookes Valley para otro día de sol y volleyball. Esta vez llegué más temprano y habían menos personas, por lo que pude jugar más. La desventaja fue que me lastimé más los brazos. Este día mi amigo mexicano #1 también fue, así que cuando terminamos de jugar lo invité a mi casa a cenar y pedimos hamburguesas y malteadas de mi ahora restaurante favorito. 

Miércoles. Me pasé todo el día en coma después de dos días demasiado activos. Tuve una junta con mi "tutora personal" para ver si tenía algún problema o preocupación, y para meter un poquito de presión en cuanto a planes para después de la graduación. Pero como apenas iba empezando el semestre, todavía estaba demasiado perdida como para pensar. El resto del día me la pasé descansando porque tenía los brazos tan adoloridos que ni siquiera los podía mover. Estoy casi segura de que sí me lastimé algo, pero pues no tenía mucho que hacer al respecto.

Jueves. De nuevo me pasé la mañana descansando y tratando de leer sin quedarme dormida, y en la tarde fui de compras a las tiendas que ahora me quedan cruzando la calle. Para cenar preparé un nuevo experimento de pasta con mantequilla y camarones, que no me quedó nada mal. En la noche estuve viendo las lectures para la siguiente semana. Lo que sí está muy mal planeado, considerando que las clases son en lunes y martes, es que para los profesores decidieron subir los videos de las clases en viernes, lo cual me arruina el fin de semana y me deja sin nada que hacer en miércoles y jueves. No se a quién se le ocurrió esa brillante idea pero sí me voy a quejar.

Viernes. Mi amigo mexicano #1 tuvo una entrevista de trabajo en un restaurante cerca de mi casa (y sí le dieron el trabajo así que ahora lo voy a ver todavía más seguido) y pasamos a un café de la zona a comer lunch y platicar un ratito. Luego de la visita rápida, me puse a leer y a seguir trabajando tratando de adelantar cosas para la siguiente semana. Después de cenar, volví a intentar la súper receta de galletas de mantequilla, pero nada más no le atino al horno "de gas" así que se me quemaron. Posiblemente seguiré gastando mantequilla hasta que me salgan, así que espero que lo logre pronto. 

Sábado. Se fue la luz en la tarde por tremenda lluvia que estaba cayendo, y por cuestiones del destino estaba sola en la casa así que sí me asusté un poquito y no supe que hacer. Luego de avisarles a mis homies y sin poder hacer nada más, aproveché el tiempo y la luz del día para leer sin distracciones. Ya después me dormí un ratito y cuando desperté mágicamente ya teníamos luz, y descubrí que a veces los problemas sí se arreglan ignorándolos y durmiendo. 

Domingo. Hubo una sesión de práctica de volleyball como preparación para las pruebas para entrar en el equipo que esta vez se atrasaron un poquito. Estuvo divertido e hice nuevas amigas recién llegadas a Sheffield, aunque me terminé de lastimar los brazos. Me pasé el resto del día trabajando y viendo lectures, y para cenar pedí "fish & chips" porque me dio flojera cocinar y como premio por haber trabajado tanto en la semana.

Y pues así comenzó el semestre. Fuera de algunas medidas de seguridad, tener que usar cubrebocas y estar desinfectándome las manos a cada rato, no se siente tanto la diferencia; además de que está mejor tener a menos gente en el mismo espacio. La verdad sí empecé muy motivada y especialmente con ganas de jugar volley, pero ya les contaré cuánto me duró la emoción y cuánto duraron las medidas de seguridad antes de volver a cerrar todo. En fin, espero escribir más la próxima semana y hacer más trabajo en general, pero no prometo nada porque ya se me juntó el mandado, como dicen por ahí. Así que esto es todo por hoy, ¡nos vemos!

3/10/20

The Lockdown Diaries #6

¡Hola! Ya se que ha pasado mucho desde la última vez que escribí o que hice algo productivo. Al parecer aproveché mis últimas semanas de vacaciones para apagar mi cerebro, dormir, y salir lo más posible antes de tener que encerrarme a trabajar. Por lo tanto creo que tengo bastantes cosas que contar sobre mi último mes de vacaciones. En retrospectiva creo que debí aprovechar para adelantar un poco de trabajo, pero sí lo intenté y no pude. En fin, comencemos con el resumen de septiembre.

En cuanto a películas, vi una o media casi cada noche mientras tejía para ocupar mis manos, así que he visto bastantes cosas. Entre las que vi estuvieron: Patch Addams, Deadpool, La Leyenda de la Nahuala, Charlie y la Fábrica de Chocolate, Parenthood, How To Be a Latin Lover. Rayas: Una Cebra Veloz (o como le dije a mi mamá "algo de una cebra" porque no me acordaba del nombre oficial), Labyrinth, Hotel Para Perros, Blades of Glory, La La Land, Matilda, y finalmente el documental 1994 (buenísimo para aprender sobre algo de lo que siempre escucho pero que no acababa de entender). Acabé toda la serie de La Casa de las Flores y hasta empecé a sonar más fresa cuando la acabé. También empecé Once Upon a Time pero me está costando trabajo ponerle atención aunque sí está interesante.

Con el abandono repentino de mis housemates, porque mi homie #2 fue una semana a su casa pero no me avisó cuándo iba o cuándo regresaba, y mi homie #1 se enfermó y se fue unos días a su casa para que sus papás la cuidaran; empecé a escuchar más podcasts. He aprendido que sirven para sentir que soy parte de una conversación, por más triste que eso suene. Los que más he estado escuchando son principalmente de los ex-Youtubers que me gustaban en secundaria y prepa incluyendo Yayo & Strecci, Los Perrazos y RadiOvni. Aunque el que más he escuchado es Leyendas Legendarias, al punto de que escuchaba varios capítulos al día y ya me puse al corriente a menos de un mes de haberlo descubierto.

Como dije antes, estos días traté de apagar mi cerebro lo más posible por lo que casi no leí. Solamente acabé Revenge Wears Prada (meh), I Have More Souls Than One de Fernando Pessoa, y La Plaza del Diamante, el cual me prestó la mamá de mi homie #1 y que traté de leer con acento español para que sonara más auténtico. Spoiler: no me sale el acento español por más veces que haya visto Élite. 

En cuanto a la comida, cené "hamburguesas" caseras varios días para usar el queso que me quedó de la vez que usamos el asador en junio, y las llamo así porque no quise comprar pan para que no me sobrara. Tenía la intención de hacer una cena especial con mis homies para el 15 de septiembre pero al final no organizamos nada y solamente me pedí unas quesadillas y un elote (amarillo aunque le puse tajín) para por lo menos no tener que cocinar y para aprovechar los cupones de Uber Eats que me llegan bien seguido. Y para no desperdiciar descuentos, sobre todo del 30%, compré otra hamburguesa con malteada de mi restaurante preferido. Siento que a estar alturas ya deben de reconocer la orden y la dirección.

En la sección de "Aventuras con mi amigo mexicano #1", una tarde salimos a practicar con la que ya se volvió "nuestra" patineta cerca de los edificios de residencia de la universidad antes de que se llenaran de estudiantes de primer año. Como dos horas más tarde regresamos a mi casa para dejar la patineta y ponerme un pantalón porque se me ocurrió salir con shorts pero el clima no estaba para eso. Luego bajamos la colina al parque Bingham para encontrarnos con sus amigos de la sociedad de swing con la promesa de que tal vez jugaríamos volleyball. Al final jugamos dodgeball y otros juegos inventados, para los cuales no tenía talento ni condición física. Terminamos regresando a mi casa para cenar porque ya era tarde, teníamos hambre, estaba más cerca, y era la opción más rápida para no discutir por elegir un restaurante. Esa noche descubrimos que somos un desastre para cocinar, por lo que creo que de ahora en adelante nos vamos a limitar a salir a comer. 

Hicimos un fin de semana de tacos pre-día de la independencia en Kelham Island porque mi amigo se iba a ir de viaje por unos días e iba a pasar el 15 y 16 en otro lugar. Fuimos al restaurante mexicano Piña en viernes porque ya no alcanzamos espacio de lunes a miércoles cuando tenían 50% de descuento. Aún así disfrutamos los taquitos, las cervezas, y el shot de tequila para calentarnos antes de caminar a nuestras casas. Al día siguiente fuimos al mercado de Peddler donde siempre tienen puestos de comida diferentes. Probamos unos "chilaquiles" y tacos de barbacoa (creo) de un lugar llamado Tacoporium, pero estuvieron demasiado pequeños y terminamos compartiendo una pizza de chorizo y pollo de Nether Edge Pizza que ya había probado antes y que está buenísima. Las bebidas estuvieron mejores: un slushie de tequila (aunque mala opción para el frío que hacía), un whisky muy bueno; y luego fuimos a Church para calentarnos con un café y chocolate caliente respectivamente más un shot de Patrón de café.

La última aventura fue cuando fuimos a pasear por la galería Millenium para ver una parte del Festival of the Minds. Todavía no entiendo bien de qué se trató, pero vimos algunas cosas interesantes y mi amigo aceptó llenar la encuesta de comentarios para luego dejarme contestarla toda y reírse de mis respuestas. Saliendo fuimos por un café y chocolate caliente respectivamente, que ya es nuestra orden de siempre cuando hace frío (ya no sé para qué me pregunta). A pesar de que era temprano fuimos a buscar algo para comer/cenar (porque yo sí comí lunch y mi amigo no), y por falta de espacio en el restaurante de sushi que fue la primera opción, o en cualquier otro lugar porque era sábado, dimos como 3 vueltas por las mismas 4 cuadras hasta que mi amigo se acordó que había otro local más grande del lugar de sushi. Ahí sí encontramos espacio y por fin nos sentamos a comer todos adoloridos de los pies por traer botas bien punks pero ligeramente incómodas. 

El primer y único evento grande al que fui fue la exposición Art in the Gardens en el jardín botánico. Fue exposición y venta de obras de artistas locales, artesanías, y comida. No compré mucho porque me di cuenta que solo llevaba 7 libras en efectivo, pero fue lo suficiente y al menos conocí muchos artistas que me gustaron, además de pasar un buen rato en el parque. De regreso y ya cansada, pasé a una tienda por una pizza y una cerveza, y terminé mi cena dominguera con la rebanada enorme de pastel de chocolate que compré en el parque.

En una misión para encontrar los libros que necesito para este semestre, fui a varias tiendas de segunda mano en Ecclesall Road, Crookes, y Broomhill. Aunque no tuve suerte, terminé aumentando mi colección porque me daba pena salir de las tiendas sin nada con todo el trabajo que cuesta caminar hasta allá, ponerme el cubrebocas y gel antibacterial, y hacer que limpien todo lo que toco. Tuve que comprar algunos libros por internet, pero todavía me faltan varios. Y sí, podría conseguirlos en pdf pero ya paso demasiado tiempo en frente de mi computadora y celular, y me tardo más leyendo en línea.

En los días en que mi amigo #1 no estuvo en Sheffield tuve que encontrar en qué ocuparme, así que aquí está la lista de cosas random que hice mientras: 

1. Me divertí pegando mi calendario de post-its de Octubre casi dos semanas antes del inicio del mes por no tener nada mejor que hacer. Me di cuenta de lo mucho que me ayuda simplemente ver el calendario para sentir que mi vida está en orden.

2. Ya que dijeron las fechas para las pruebas para entrar al equipo de volleyball, me motivé para empezar a hacer ejercicio y hasta hice una rutina de 3 semanas en lo que llega el gran día. Por varios días no hubo nada más que me hiciera moverme más que el volleyball. No había fallado en como 10 días hasta que me lastimé, pero de eso hablaré después.

3. Los dos últimos días de calor de verano los pasé en el parque botánico y en el parque Weston con una rápida visita al museo del mismo nombre nada más para ver que había de nuevo. Los que me siguen en Instagram sabrán que hasta los rinocerontes prehistóricos son responsables y usan cubrebocas. 

4. En el verano me inscribí para "trabajar" (sin paga) como mentora/guía de estudiantes nuevos. Hasta ahora solo he conocido a una de mis mentees para platicar y llevarla a conocer el campus. Resultó que soy malísima para dar direcciones y recomendaciones, pero me gustó sentirme útil. 

5. Re-pinté mi cabello porque ya se veía muy deslavada. Ahora soy más morada y menos violeta-rosa, pero mi cabello está un poco bastante maltratado. Esta vez compré tinte permanente en lugar de semi-permanente así que veremos cuanto tiempo dura el color.

Finalmente, el inicio del semestre. Me dieron mi horario el jueves antes de entrar a clases, por lo que tuve que pasar todo el fin de semana desde el viernes trabajando porque tengo todas mis clases presenciales en lunes y martes. Lo que pasó desde el lunes tendrá que ir en otro post porque ya cuentan como actividades universitarias aunque solo hayan sido dos días, pero fueron dos días muy ocupados.

Ahora sí creo que es todo por hoy y por septiembre. Se notará que me la pasé en la flojera en todos los sentidos, pero había que disfrutar el poco sol y tiempo libre que tenía, a pesar de haberme quejado del calor y del aburrimiento por casi todo el verano. Espero escribir más seguido aunque no prometo nada con todo en lo que me metí este semestre además de mi aparente falta de organización y energía. En fin, sigan cuidándose y feliz octubre. ¡Hasta pronto!

3/9/20

The Lockdown Diaries #5

 ¡Hola! Ya ha pasado más de un mes desde que escribí la última actualización así que ahora que ya empecé a disfrutar más el verano y a salir un poco más (con todas las precauciones) tengo más cosas que contar. Además de que el clima mejoró bastante por algunas semanas, aunque la típica lluvia británica no tardó en volver. Por lo mismo de que he estado saliendo más dejé medio olvidado el blog, pero por fin me decidí a sentarme y usar mi cerebro. En fin, aquí va un resumen de lo que he hecho en el último mes.

Casi no he leído estas últimas semanas, así que en este tiempo creo que solo terminé la biografía de Banksy (de la cual escribí una reseña), The Vigilante de John Steinbeck, y The Age of Innocence de Edith Wharton, que empecé desde antes de la cuarentena pero apenas acabé hace unos días. De verdad mi cerebro no ha querido participar últimamente.

En cuanto a películas y series, he visto tantas que no se si he podido llevar la cuenta. Entre algunas películas que vi están: el live-action de Peter Pan, La Espada en la Piedra (mínimo 2 veces), Chicuarotes, The Duff, The Dirt (mínimo 3 veces), Los Años Pantanosos de Kermit, The Mask, Piratas del Caribe 5, Zootopia, One Day, La Dictadura Perfecta, un día de maratón de la Saga Crepúsculo, Airplane Mode, Soltera Codiciada, Ready to Mingle, The Impossible, Justice League, y Remember Me. De series estuve viendo: La Búsqueda, The Umbrella Academy 2, Elite (completa, otra vez), El Diablero, La Casa de las Flores (que todavía no acabo), y algunos capítulos de Zack y Cody y de Hannah Montana para revivir mi infancia.

En cuanto a comida, he ordenado del mismo restaurante de hamburguesas y malteadas al menos 4 veces, una por emergencia porque me di cuenta de que no tenía los ingredientes para mi cena y como era domingo las tiendas cerraban temprano. Las demás veces si fueron por puro gusto. Otro día accidentalmente ordené 3 bubble teas por el precio de uno y pues sí, agradezco mucho los descuentos de Uber Eats. Entre las cosas que he preparado recientemente estuvieron muchas quesadillas de chilli con carne, pasta con albóndigas (con trampa porque compre la salsa y las albóndigas ya hechas), y enchiladas bien picosas, con las que sufrí para terminármelas excepto cuando mi amigo mexicano me ayudó. He tratado de hacer s'mores y fresas con chocolate pero todavía estoy aprendiendo a usar este horno y el microondas así que no me han salido muy bien.

Ya que mi homie #1 me abandonó de repente (un día salió para ver a su familia y regresó dos días después para recoger unas cosas y no la volví a ver), y como mi homie #2 regresó a su casa, estuve saliendo mucho con mi amigo mexicano #1. Así que aquí están todas las aventuras que hemos tenido:

Uno de los días que estuvimos a más de 30 grados, salí al parque a jugar volleyball con mi amigo, y luego de darnos cuenta de que eramos los únicos locos haciendo algo en vez de simplemente tomar el sol, fuimos a un restaurante con buen aire acondicionado por una hamburguesa y una malteada. Después de cenar, pasamos a la tienda por un par de cervezas y seguimos jugando en otro parque hasta que cayó una tormenta de 10 minutos y tuvimos que huir. Otro día salimos a hacernos piercings, él se perforó las orejas para ponerse aretes normales y yo me puse uno en la parte de arriba de la oreja, porque no están haciendo perforaciones faciales por ahora. Saliendo fuimos por tacos a un food court y luego nos seguimos a un bar de rock para un par de cervezas.

Los otros dos días más calurosos (de 28 grados para arriba) también me la pasé con mi amigo. Primero, un día fuimos a comer lunch a un restaurante temático de Harry Potter que acaba de abrir enfrente de mi casa. El menú incluía una malteada de butter beer, un pastel, palomitas, pretzels, chocolates, falafel, y un pudín Yorkshire. Creo que eso era todo. Después caminamos al centro por un bubble tea y a sentarnos un rato en el parque, pero mejor nos fuimos a esconder del sol a un bar. Luego regresamos a mi casa (con un par de cervezas) para cocinar enchiladas para la cena. Ese día ya no sabíamos cómo hacer para que se nos quitara el calor porque si abríamos las ventanas entraba aire caliente y no servía de nada. Al día siguiente nos volvimos a encontrar en el centro para ir por más bebidas refrescantes (solo smoothies, cafés, y tés helados) y a pasear por tiendas vintage. De regreso a mi casa pasé por un helado y continué muriendo de calor. ¡Hasta me bañé con agua fría!

Un triste día lluvioso fuimos a Eclessall Road a cenar, principalmente para aprovechar el 50% de descuento que estaban ofreciendo los restaurantes de la ciudad este mes para promover que la gente salga. Fuimos a un restaurante de comida vietnamita (creo), y luego por una cerveza en lo que esperábamos a que bajara la lluvia, pero no bajó y no podíamos nada más caminar por el área así que cada quien se fue para su casa. Salimos otro día a comer a un restaurante asíatico, bentos y bubble teas. Estuvimos dando vueltas por la ciudad todo el día, tomando café o té helado, compramos chamarras de descuento en una tienda vintage, y terminamos en el mismo bar de rock.

Compré una patineta nada más porque estaba aburrida y pues salí una vez para probarla y ver si no me caía; y sobreviví. Tenía años sin usar una patineta, y no puedo hacer más que andar en un camino plano, pero no me caí ni me lastimé. Invité a mi amigo a probar porque él nunca había usado una y tuvimos que empezar desde cómo poner los pies hasta como empujarse, cosa que yo no sé como aprendí. De nuevo, nadie salió herido. Pasamos casi 3 horas dando vueltas en la zona de edificios de alojamiento de la universidad que siguen vacíos hasta que empiece el semestre; por lo que es buen lugar para practicar sin que nadie nos vea y sin atropellar a nadie. Para acabar ese día cenamos casi a las 8 en el único lugar que seguía sirviendo comida a esas horas y le tocó pagar a mi amigo porque yo solo salí con celular, llaves, y patineta. Lo bueno es que por fin probamos los famosos pies de Nottingham House que todo mundo presume y que no habíamos podido comer antes porque el lugar siempre estaba lleno. Sí están bastante buenos pero demasiado grandes para mí, con todo y que me estaba muriendo de hambre.

La última vez que nos vimos fue para ir a cenar a Church (el restaurante de Oliver Sykes y de mis lugares favoritos en la ciudad), que por fin abrió desde que inició la pandemia, con nuevo menú y nueva decoración. Salió más caro de lo que esperaba porque ya no incluyó el descuento que estuvimos aprovechando todo agosto y además pedimos cócteles de tomar, pero valió la pena por la pura emoción de volver a ir y de tomar más fotos en el photobooth. Después quisimos caminar por la zona pero estaba medio frío así que nos metimos a otro food court para que él se tomara un café, yo un chocolate caliente con Bailey's, y media crepa que compartimos pero que ni entre los dos logramos acabarnos. 

La otra persona con la que salí fue con mi alumno de español. Como se mudó más cerca de la ciudad, me invitó a cenar a su casa para conocernos en persona luego de 3 meses de clases en línea. La segunda vez nos vimos en un bar especializado en ginebra porque al parecer es su alcohol de preferencia. La pasé bien, pero por su trabajo ya no ha tenido tiempo para seguir aprendiendo.

Sigo aprendiendo a usar el nuevo formato de Blogger para escribir, así que escribiré todos los extras en varios párrafos:

-Me inspiré para volver a dibujar después de meses sin tocar mis cuadernos de dibujo y estuve trabajando en una "flash sheet" con ideas para tatuajes basado en el disco favorito de mi amigo mexicano, para ver si ya se anima a hacerse su primer tatuaje. -También estuve tejiendo mucho mientras veía todas las series y películas, y hasta el momento van 5 bufandas. Pronto las voy a promocionar por si a alguien le interesa alguna. -Un gato vecino vino a visitarnos cuando la familia de mi homie #1 vino a vernos (antes de que desapareciera) y nos hicimos amigos, aunque ya no me ha dejado saludarlo las siguientes veces que ha estado aquí porque se asusta cuando abro la puerta del jardín. -Compré un nuevo par de zapatos como sandalias para el calor, que solo he usado 3 veces, y 2 chamarras en preparación para el invierno. Que conste que estaban en descuento. 

-He estado escuchando más podcasts porque no tenía con quien hablar la mayor parte del tiempo y se siente como si fuera parte de la conversación. No se si eso suena triste pero pues ayuda con la soledad. -Aproveché un domingo para pedir mi combo favorito de hamburguesa y malteada, más un waffle, y ver la obra Agotados con Chumel Torres y Alan Estrada. Tengo que admitir que me gustó más la versión de Chumel, en general su personalidad me da más risa. -Mandé unas postales a mi mamá y a mis abuelos, que les llegaron 3 semanas después así que no tardaron tanto. Hay que recordar que las postales que mandé desde París en Navidad llegaron en febrero, así que menos de un mes ya lo considero rápido. -Sigo dando clases de español, pero ahora tengo una nueva alumna y está más fácil porque es principalmente ayudar con conversación. Además ahora ya puedo dar clases en persona y está raro pero bonito.

-Por fin fui a que me cortaran el cabello decentemente. En los últimos años yo me he cortado el cabello mientras estaba en Inglaterra y esperaba a regresar a México en el verano para que me arreglaran el desastre. En vista de las circunstancias actuales, tuve que recurrir a gastar un poco más por que me quitaran lo más maltratado, pero ni se nota la diferencia. -He movido mis horarios para desayunar a las 11 y regresar a mi cama hasta la 1-2pm, comer lunch, y luego seguir con mis actividades del día. Dicho de otra manera, no puedo atender a nadie ni hacer planes antes del mediodía. 

Actualmente mis homies ya volvieron a la casa y me movieron muy feo mis rutinas y lo que ya me había acostumbrado a hacer en el mes que me dejaron sola. Especialmente mi homie #2, que me avisó a las 8 de la mañana que ese mismo día iba a llegar a Sheffield, y llegó para hacer limpieza total de la casa completa y mover todo a su antojo, además de estorbarme en la cocina. Lo que sí es que mínimo me invitó a cenar con su único otro amigo en la ciudad para aprovechar los descuentos de los restaurantes, pero luego terminamos cruzando la ciudad por un helado de McDonald's. Terminé tomando el camión de regreso a la casa para no caminar más y para ganarle y bañarme primero. Además de eso, de ver Of Mice and Men una noche, y de una caminata por la zona cercana a la casa, no hemos convivido más.

Aún me queda casi un mes de vacaciones, y todavía no sé en qué me voy a entretener todo este tiempo, pero espero que queden algunos días de sol y calor para disfrutar antes de encerrarme para el invierno. Todavía queda ver cómo van a ser las clases porque no han aclarado nada, pero bueno. Con esto me despido, tal vez vuelva a actualizar todo antes de que empiece el semestre oficialmente, pero ya veremos. ¡Hasta luego!

18/8/20

Banksy: The Man Behind The Wall

 ¡Hola! Hoy voy a hablar de un libro que me costó mucho terminar porque casi nunca leo biografías o cosas que no sean ficción, pero estaba determinada a acabarlo. Además es sobre un tema que me gusta mucho explorar y del que no se mucho, a pesar de que escribí un ensayo sobre Banksy y los dilemas del arte para una de mis clases. En fin, comencemos con la reseña.


Banksy: The Man Behind The Wall de Will Ellsworth-Jones

Resumen: Este libro explora la vida de Banksy como artista desde sus comienzos pintando graffiti en Bristol hasta la actualidad, vendiendo sus obras en las casas de subasta más reconocidas, y así convirtiendo al graffiti en una forma válida de hacer arte. Es una forma de meterse al mundo del street art y ver cómo fue creciendo la carrera de Banksy, siendo ahora uno de los artistas más reconocidos del mundo. También habla sobre su anonimato y todo el secreto que envuelve a su persona y sus proyectos, que normalmente anuncia y promociona él mismo; además de cómo es ser un vándalo y un vendido al mismo tiempo. Finalmente toca temas sobre la dificultad de autenticar obras de graffiti y del dilema sobre conservar una obra de arte o dejar que el tiempo la borre.

Opinión: Como dije al principio, casi nunca leo biografías y me cuesta trabajo seguir historias sin una trama clara, pero me considero gran fan de Banksy y quería saber más sobre su mundo y cómo hace su trabajo. A estas alturas ha hecho demasiadas obras de las que yo ni siquiera estaba enterada y exposiciones que sucedieron cuando yo tenía menos de 10 años, así que hay muchos proyectos que ver, incluyendo sus libros y su película. Sobre todo me gustan sus pinturas políticas y todo lo que es irónico o crítico, aunque el libro no habla tanto de la historia de sus obras sino del negocio del arte y de las complicaciones para conseguir obras originales y venderlas. La manera en la que trabaja, siempre manteniendo algo de secreto, siempre ha interesado al público; y a pesar de ser tan reconocido, siempre le da la oportunidad de disfrutar de su trabajo a gente que no es tan fan del arte o que no puede pagar más de $100,000 por una pintura. También son interesantes los comentarios del autor sobre lo difícil que es conseguir entrevistas o información sobre Bansky aunque sea a través de gente que ha trabajado con él pero que no es parte de su equipo, y deja ver el trabajo que debió haber tomado escribir su biografía a partir del internet. Pero es una de las ventajas del internet y uno de los problemas de Banksy, que cualquiera puede obtener una de sus obras y cualquiera puede ganar dinero a partir de ellas.

Calificación: 6/10. Me gustó por lo que aprendí sobre la cultura del graffiti en Inglaterra y sobre el efecto de Bansky sobre el público, pero como no es una autobiografía o un libro escrito por el mismo artista, es difícil realmente conocer algo de él como persona (aunque eso sea parte del misterio y la intriga). Más bien es un relato sobre los descubrimientos del autor a medida que habla con gente cercana a Banksy o que ha trabajado con él o con sus obras en algún momento.

Creo que nunca he visto un graffiti original, pero queda la esperanza la próxima vez que vaya a Londres o si alguna vez visito Bristol; cuando sea más seguro viajar. Pero bueno, por el momento nada más voy a buscar el documental Exit Through the Gift Shop (que hasta estuvo nominado para un Óscar) y a seguir buscando las fotos para complementar la lectura. Aunque si alguno de mis amigos en Sheffield lee esto, esta ciudad también es conocida por la cantidad de graffiti y street art que se puede encontrar en todas partes (tip: cerca del Tesco en Ecclesall Road y en Howard Street en dirección a la estación de trenes). Ahora sí, sin nada más que decir aquí me despido. ¡Hasta pronto!

9/8/20

Como Agua Para Chocolate

¡Hola! Me tomó un rato volver a escribir porque no estuve leyendo mucho estas últimas semanas y no tenía sobre qué hacer una reseña. Pero por fin encontré algo en lo que sí me pude concentrar. Tenía muchísimo tiempo que no leía nada en español, pero por más que me acostumbre a leer en inglés a veces mi cerebro necesita un descanso. En fin, no sabía que este libro fuera tan conocido internacionalmente, porque sabía que mi mamá lo había leído y hasta hay una película que luego estaba en la tele; pero también me lo pusieron de ejemplo en una de mis clases de la universidad (para discutir si las recetas cuentan como literatura) y en realidad el libro me lo prestó la mamá de mi homie, quien habla español y vivió en Barcelona por un tiempo. Pero bueno, comencemos con la reseña.

Como Agua Para Chocolate de Laura Esquivel

"Lo malo de llorar cuando uno pica la cebolla no es el simple hecho de llorar, sino que a veces uno empieza y ya no puede parar."

Resumen:  A pesar de estar enamorada de Pedro, Tita debe permanecer soltera y cuidar de su madre debido a una tradición familiar. Pedro decide casarse entonces con Rosaura, la hermana de Tita, para poder estar cerca de su verdadero amor. Tita se crió en la cocina y desde joven se volvió experta en el arte de cocinar, por lo que expresa mejor sus sentimientos a través de la comida que prepara; aunque vive atormentada por las órdenes y la presencia su madre, quien siempre estaba ahí para mantenerla alejada de Pedro y recordarle su lugar en la familia.

Opinión: Realmente creo que es un libro difícil de entender si no se conoce el español mexicano por los colonialismos, frases, y demás expresiones que se usan, que por un lado también hacen al libro más auténtico y simplemente más mexicano. Dicho eso, es realmente una novela romántica para señoras, muy de pueblo y ligeramente erótico pero siempre viendo al amor desde un punto de vista espiritual. Con tantas recetas dan ganas de ponerse a cocinar, aunque se que yo no tengo nada de talento y que lo más que puedo hacer son quesadillas. Pero el libro definitivamente transmite la complejidad de los platillos mexicanos y lo especiales que son los sabores, el esmero que se pone en su preparación, y lo mágico que puede ser un platillo que puede parecer simple para una persona. Se podría decir que es una novela histórica y realmente se aprende un poco sobre las tradiciones (que agradezco que ya no se sigan tanto actualmente), remedios caseros, y métodos para cocinar que se utilizaban en la época de la revolución; además de mencionar el estado de la política en el país y algunas de las consecuencias que la lucha revolucionaria tuvo en la vida de las familias mexicanas. En general está un poco cursi, pero también te hace apoyar a Tita y querer que su vida mejore, por no decir lo mal que me cayó Mamá Elena.

Este libro está especialmente recomendado a los mexicanos que están en el extranjero y que extrañan el país. También está bien leerlo solo por la curiosidad, especialmente por ver como se mezcla la narración con la preparación de la comida y como afectan los sentimientos en las actividades cotidianas. Los capítulos están cortos y la verdad casi escaneaba las recetas así que aunque empecé el libro hace varios días, lo terminé en una sola tarde. Y aunque tengan cosas que hacer, está rápido de leer.

A ver si cuando vuelva a México y si tengo tiempo de leer puedo seguir con El Diario De Tita, que creo que mi mamá leyó más recientemente (posiblemente ya hace unos años pero bueno). Pero bueno, con esto me despido. Espero acabar algún otro libro en los próximos días, porque si no no sé sobre que más escribir, hehe. Ahora sí me voy, ¡hasta pronto!

26/7/20

The Lockdown Diaries #4

¡Hola! Después de todo lo que escribí la semana pasada, me di cuenta de que necesitaba un post completo para hablar de toda la experiencia que fue mudarme durante la cuarentena. Hay mucho que explicar, así que empecemos desde el principio.

La mayoría de contratos de casas para estudiantes empiezan el primero de julio y terminan el 30 de junio, y como mi homie #3 no quiso vivir con nosotros un año más, tuvimos que buscar otro lugar en vez de extender nuestro contrato. En febrero encontramos una casa bonita para 3 personas, pero desde ese punto para mí fue un problema que no sabía donde pasaría la noche del 30 de junio. Con la pandemia y la cuarentena, la situación se complicó porque mis dos homies decidieron quedarse en la casa y yo no pude regresar a México, por lo que ahora eramos tres personas que estarían sin casa una noche.
Por lo tanto, el plan fue que nos quedaríamos en casa de mi homie #1, cuyos padres viven a las afueras de Sheffield; pero tendríamos que acampar para respetar las reglas del distanciamiento social. A mí ya me da pena con ellos porque el año pasado también me ayudaron a mudarme, y esta vez sabíamos que iba a ser más problema con más personas. Ya que empezamos a mover nuestras pertenencias a su casa poco a poco, y para no invadir más su espacio, yo preferí quedarme esa noche en el departamento de mi amigo mexicano #1. Le había contado la situación desde antes, y como todos sus vecinos se habían ido cuando anunciaron la cuarentena, tenía el departamento solo y un cuarto extra. Además, los contratos para los edificios de la universidad duran una semana más, así que tenía más días y por si necesitaba quedarme más tiempo. Como verán, las opciones eran: pasar la noche en una casa de campaña con mis dos homies y llenar la casa de los papás de mi homie #1 con nuestras cajas y maletas, o quedarme en un cuarto con cama y baño propio sin incomodar más a nadie. Según yo fue una elección bastante obvia. Y por problemas que contaré en un momento, terminamos pasando dos noches en nuestros respectivos alojamientos.

Empecé a empacar a principios de junio, principalmente porque no tenía nada mejor que hacer. Primero fueron 4 bolsas llenas de libros, y ni siquiera fueron todos porque tenía la esperanza de leer como 7 libros en el mes. Luego seguí con todos los papeles y notas de clases una vez que oficialmente acabé el semestre. Pero lo primero que se llevaron los papás de mi homie #1 fue una maleta llena completamente de ropa de invierno, vestidos, y todo lo que le pude meter. Así fui la primera en empezar a vaciar la casa para que el mero día no tuvieran que dar tantas vueltas sacando todo.
Como 10 días antes de la mudanza, ya tenía el 75% de mi cuarto empacado, con solo lo necesario para sobrevivir dos semanas, aproximadamente. El 29 de junio oficialmente terminé de empacar y de sacar mis maletas. Solamente dejé lo absolutamente necesario y lo que siempre guardo de último minuto, como algo de ropa, electrónicos y cargadores, ropa de cama y almohadas, y trastes de cocina.

El primer gran problema que tuvimos fue la contratación de servicios como internet, agua, luz, y gas. Los años anteriores habíamos tenido los servicios incluidos en el pago de la renta, así que no habíamos tenido por qué preocuparnos. Pero este año decidimos que ya eramos lo suficientemente responsables para pagar nosotros mismos, además de que ahorraríamos unas cuantas libras al mes. Nos tardamos un poco en sentarnos a investigar qué era lo que necesitábamos hacer, así que cuando por fin firmamos los contratos, resultó que nos activarían el internet hasta el 9 de julio y la luz y el gas hasta el 16. Después de un momento de pánico y de considerar que tendríamos que vivir con velas y lámparas por dos semanas, vimos que solamente tendríamos que pagar extra al proveedor actual, pero que no nos iban a cortar la luz ni el gas.

Y ahora, un resumen de cómo fueron los 3 días que nos tomó estar saltando de un lugar a otro en lo que nos acomodamos en nuestra nueva casa.
30 de junio
Me tomé mi tiempo en la mañana para prepararme, vestirme, arreglarme y desayunar con calma; mientras mis homies empezaron a correr muy ruidosamente desde las 7 de la mañana. Estuvimos sacando maletas, cajas, y limpiando con la esperanza de terminar antes del medio día, pero sabiendo que nadie iba a llegar a sacarnos a patadas de la casa.
Ya que según yo había terminado con todas mis pertenencias, los papás de mi homie me pasaron a dejar al edificio de mi amigo mexicano para instalarme con él, pero en cuanto llegué me di cuenta de que había olvidado la comida que dejé en el congelador (la mitad de mi cena para ese día) y mi súper chamarra de mezclilla con pins y parches, así que tuve que regresar corriendo de subida (unos 20 minutos) para rescatar mis cosas y ayudar a sacar la últimas cajas antes de que mis homies se fueran. Ahora sí, después de mucha pena de que me vieran regresar, me volvieron a dejar en el edificio y por fin me quedé ahí a descansar un poco de la caminata. 
Ya que mi amigo no estaba muy platicador, nos encerramos cada quien en su cuarto, y me pasé la tarde viendo videos en YouTube y di otra clase de español aprovechando que tenía conexión a internet. Más tarde fui a preparar mi cena, que ya había preparado nada más para meter en el microondas. Mi amigo llegó a cocinar mientras yo ya estaba comiendo, y nada más comimos en silencio antes de regresar cada quién a su cuarto.
Como estaba toda agitada y el silencio del cuarto me puso nerviosa, le dije a mi amigo que si quería salir a caminar y pues fuimos a dar una vuelta por todo el "student village" de Encliffe, o sea el área donde están la mayoría de edificios de alojamiento para estudiantes. Empezamos por el edificio donde viví el primer año, luego pasamos por la zona principal donde descubrí que hay hasta un lago y dos hoteles. Luego regresamos al departamento y casi me fui directo a dormir.

1 de julio
De nuevo empecé el día muy tranquila, me desperté temprano, me vestí, y desayuné. Aprovechando que tenía internet, pagué la licencia de TV que se tiene que pagar cada año creo, y también actualicé mi blog. Mientras tanto, mi homie #2 tenía la cita para recoger las llaves de la nueva casa a las 11:30, así que esperé a que dieran alguna señal de vida, pero como no tenía señal de teléfono y él no tiene smartphone, no le llegaban mis mensajes y a mí me llegaron los suyos un poco tarde. Esperé hasta después de las 12 para ir a investigar qué estaba pasando en la nueva casa, y nada más vi a mi amigo #1 (quien tenía cara de que acababa de despertar) para decirle que luego regresaba . 
Cuando llegué a la nueva casa, mis dos homies y la familia completa de mi homie #1 estaban revisando todo. Bueno, ya habían revisado la mayoría de la casa y nada más quedó mover cajas en el primer piso para hacer espacio para poner más cajas, y en eso nos pasamos todo el día. Para el segundo viaje del día me tocó ir a casa de mi homie por más maletas y de paso su mamá nos hizo un sándwich tostado (que me recordó a los que me hacía mi mamá) y un chocolate caliente.
Mientras esperamos la última vuelta del día de los papás de mi homie con más maletas, porque se supone que no se pueden estacionar en la calle a ciertas horas del día, no sé que estuvieron haciendo mis homies pero yo me entretuve moviendo muebles en mi nuevo cuarto y acomodando mis libros y películas en el librero. Y en lo que seguíamos esperando básicamente le encargué a mi amigo mexicano que ordenara unos taquitos para cenar en lo que llegaba. Convenientemente su departamento me quedaba a menos de 10 minutos caminando, y si él no se hubiera mudado viviríamos casi tan cerca como en el primer año, pero bueno. Cuando por fin terminamos de mover maletas, y como todavía faltaba mucho que hacer y no habíamos arreglado nuestras camas, decidimos que mejor nos quedaríamos fuera una noche más. Caminé de regreso y llegué casi al mismo tiempo que los tacos, así que llegué directo a cenar. Esa noche otra vez nos encerramos cada quien en su cuarto porque mi amigo tenía planes, y yo me quedé leyendo la Guía de Supervivencia contra Zombies de Max Brooks y viendo Warm Bodies, porque estaba en el mood para zombies.

2 de julio
Otra mañana que me pasé bien a gusto descansando de cargar cajas y maletas, con los brazos un poco adoloridos. Hasta las 2 de la tarde me avisaron que saliera con mis maletas, y ahora ya me gustó que me estén llevando en carro a todos lados. Mis homies entraron al departamento de mi amigo para ayudarme con la maleta y las bolsas que llevaba, y nada más me despedí de mi amigo #1. 
Este día desempacamos lo necesario para poder instalarnos. Más tarde fui a la tienda con mi homie #2 para llenar el refrigerador y tener qué comer. Una de las mayores ventajas de la nueva casa es que está casi cruzando la calle de las tiendas. Pero este día preferimos aprovechar un descuento de UberEats para pedir comida china y no tener que cocinar. En la tarde estuve ordenando mis maletas (que subí a mi cuarto sin ayuda) y acomodando mi cama.
Finalmente para relajarnos un poco y retomar nuestras rutinas, vimos la película Hook, que creo que nunca había visto completa. Ahora tengo ganas de ver todas las películas relacionadas con Peter Pan.

Al final me tomó dos días desempacar y otros dos decorar mi cuarto, nada más porque no me quería apurar demasiado. Hasta la fecha, ya casi un mes después, mi homie #1 no ha terminado de desempacar y al parecer no tiene planes de hacerlo. Los primeros días estuvimos arregándonoslas con el tema del internet conectándonos donde podíamos, incluyendo el internet del Costa que está cruzando la calle, el internet de la universidad que llega hasta el parque, en la casa de mi homie, etc. Tampoco servía el agua caliente y nos tuvimos que dar baños de menos de 5 minutos para no morir congelados, pero ahora ya está funcionando un poco mejor. También nos peleamos al principio porque cuando quise estrenar el horno mi homie #2 lo estaba limpiando y no me dejó usarlo, y luego cuando vi él ya había puesto su comida. Y finalmente discutimos por cómo acomodar los muebles de la sala y de la cocina.

En fin, todavía queda mucho que organizar y que arreglar, pero tenemos todavía otros 11 meses y por lo menos ya nos sentimos en casa. Ya no he leído tanto estos últimos días así que tengo que pensar si voy a seguir escribiendo reseñas o qué más puedo hacer. Pero bueno, a disfrutar un poco el verano, si es que el sol vuelve a salir. ¡Hasta pronto!

18/7/20

The Lockdown Diaries #3

¡Hola! Esta vez necesitaba desahogarme un poco de todo lo que ha pasado en las últimas semanas, así que aprovecharé el día para contarles lo que he hecho en el mes de junio y lo que va de julio. Continuaré más o menos desde donde me quedé la vez pasada, aunque no estoy muy segura de dónde fue y me da un poco de flojera revisar. En fin, comencemos.

Universidad
En cuanto tuve un poco de tiempo para pensar, elegí mis materias para el próximo año. Solamente pude elegir 2 porque tengo 4 obligatorias (en total son 3 cada semestre), y además estaba el problema de que todavía no es seguro cuáles materias van a dar y cómo van a ser las clases. Y por si fuera poco, resulta que hacer tesis no es obligatorio en mi carrera, así que la tesis estaba como opción para el segundo semestre, y podía ser teórica o en Escritura Creativa; es decir, escribir una novela (casi) como proyecto. Aunque estaba muy interesada en esta última opción, todas las materias interesantes son en el segundo semestre, así que mejor elegí una materia que me interesó desde que vi el programa de la carrera. Si todo sale bien y aprueban mis elecciones, el próximo año estudiaré Prosa y Poesía Victoriana y Romántica, Literatura Contemporánea, Literatura Moderna, y como electivas: "Teaching English as Foreign Language" y "Identity/Crisis: Trauma, Narrative, Self".
A principios de junio entregué mi última tarea de italiano, y terminé mis ensayos de Género y Restauración (para el que me tomé una semana extra después de la fecha límite oficial, pero pedí extensiones nada más para que no se me juntara el trabajo). Ya me regresaron las calificaciones de los ensayos y pues meh. No estuvieron tan mal pero tampoco son excelentes, pero no esperaba mucho de mis ensayos escritos sin ganas, sin sentido, y sin llegar al mínimo de palabras porque se me acabaron todas las ideas. De cualquier manera, ya llevo un mes de vacaciones y la próxima semana entregan calificaciones oficiales, a ver qué resulta con todos los cambios que hicieron.

Libros
Creo que sí leí bastante para sólo haber pasado mes y medio desde que escribí el último resumen, pero bueno. Ya he escrito reseñas de la mitad, pero aquí está la lista oficial. Why We Broke Up. To Kill A Mockingbird. The City of Ember (que lo acabé en dos días, creo). Food de Gertrude Stein, que es una colección de poemas sin mucho sentido. Holding Up the Universe, The Curious Incident of the Dog in the Night Time (que tampoco me duró más de 2 días). The Zombie Survival Guide de Max Brooks (que lo tenía buscando desde mi periodo de obsesión con los zombies en la secundaria). Create Dangerously de Albert Camus (que leí en voz alta porque son discursos). Crazy Rich Asians. Finalmente, por el momento estoy leyendo The Age of Innocence, que solo conozco por aquel capítulo de Gossip Girl, y la biografía de Banksy, ahora que se volvió a poner de moda con su más reciente obra de arte.

Películas/series
Este mes he estado viendo más series porque he tenido más tiempo libre, así que entre todo lo que he visto por mi cuenta esta: The Umbrella Academy. My Neighbour Totoro. A Series of Unfortunate Events (la película). Material Girls. The Perfect Man. The Breakfast Club. Step Up 5. The Edge of Seventeen. Control Z (que acabé en días y me dejó traumada con lo mucho que me recordó a la prepa). Mamma Mia 2. The Dirt (la vi dos veces en una semana porque me obsesioné con Machine Gun Kelly, el que sale de Tommy Lee). Jurassic World 2 (que tenía pendiente desde que la agregaron a Netflix). Pitch Perfect. Y más recientemente estoy en medio de Haikyu!!
Como estuvimos ocupados con la mudanza, de la cual voy a hablar en otro post separado porque hay mucho que contar, casi no vi películas con mis homies, pero aquí está la lista de lo poco que vimos juntos. Around the World in 80 Days (2004). The Skeleton Key. Sabrina 1954. 99 Homes (solo la vimos porque estaba en la tele y sale Andrew Garfield). The VVitch. Quadraphenia (con drama incluído porque mi homie #1 tuvo un momento de inspiración y se fue a media película; regresó después de una hora feliz porque había entregado su último ensayo, pero mi homie #2 se enojó porque no vio la película completa). Roots (solo vi el último capítulo pero mi homie #2 la vio completa, está buena). Concierto de Tributo a Freddie Mercury (porque estaba en la tele). Shaun of the Dead. Hook. Pirates of the Caribbean 1. Indiana Jones: Temple of Doom (todavía no me convence porque tiene demasiados clichés). Scooby Doo Live-Action (que solo conocía por memes).

Comida
Un día me preparé quesadillas de chilli con carne y de chorizo, inspiradas en las quesadillas que pedí un día, y me quedaron buenísimas. Otro de los experimentos que hice fueron galletas de mantequilla, que me salieron bien excepto porque se extendieron en la charola y quedó como una sola galleta gigante. Y eso fue todo lo nuevo que hice en todo el mes. En lo único en lo que estado experimentando más, con ayuda de mi homie #1, es en las bebidas alcohólicas. En los días más calurosos, estuvimos mezclando Malibú (ron con coco) con jugo de piña o con limonada, vodka de frambuesa con jugo de naranja, y yo he tomado más tequila con jugo de piña.
En cuanto a pedir comida, estos últimos días sí nos dejamos ir. Hemos sido grandes clientas del lugar de postres que estaba cruzando la calle de nuestra casa anterior, así que un día mi homie #1 me mandó por su waffle y una malteada para mí, hablando por su ventana mientras yo esperaba nuestra orden. Otro día, ya después de habernos mudado, descubrimos que hacen doble descuento si pedimos por internet y recogemos la orden, por lo que aprovechamos para pedir una malteada cada quien, un waffle para ella y un pastel para mí. A mediados de junio se me ocurrió organizar una noche temática de los 50's con hamburguesas, malteadas, y rock n' roll, aunque solo mi homie #2 me hizo caso, pero fue divertido y la comida estuvo muy buena. Uno de los tres días calurosos que hubo en junio, hicimos hamburguesas en un mini asador, y para ser el primer intento nos quedaron muy bien. Además estuve muy orgullosa de mí misma por mi habilidad de prender el asador.
Los primeros días en la nueva casa estuvimos aprovechando un descuento en UberEats y por lo menos yo no cociné los primeros tres días. Además la segunda noche que pasé con mi amigo mexicano pedimos tacos de tinga (chiquitos pero buenísimos). El primer día en la nueva casa pedimos comida china, yo comí pollo en salsa de naranja con fideos y me tocaron todos los rollos primavera porque nadie más los quiso. La segunda noche pedimos comida italiana, con una lasagna vegetariana que le encantó a mi homie #1, y yo elegí "penne carbonara". El tercer día yo me pedí una hamburguesa de McDonald's con papitas y refresco porque abrieron recientemente y tuvimos problemas de espacio en la cocina.
Más recientemente, mi homie #1 probó las hamburguesas del mismo restaurante de cuando hice la cena temática, y las dos disfrutamos otra comida deliciosa acompañada con malteadas. Otro día las dos ordenamos pizzas hechas en horno de leña que nos gustaron mucho. Finalmente, para su cumpleaños hace unos días, comimos con su familia y ordenamos comida india (del restaurante del que siempre piden comida) y yo pedí la misma comida porque sigo sin entender la diferencia, pero me gusta mucho el pollo a la mantequilla.

Salidas
Además de salir de compras por comida, y a uno que otro encargo como al banco o al correo, ya hemos estado saliendo un poco más nada más a caminar y dar la vuelta. El día del solsticio de verano quería ir al parque a ver el atardecer, tal vez hacer un picnic y que nos quedáramos ahí un rato; pero mis homies no me hicieron caso y salimos bien tarde. Apenas llegamos a tiempo para el atardecer, pero estaba nublado y no se vio nada, además estaba bien lleno y mi homie #2 se puso de mal humor.
Otro día salí a la zona de Ranmoor, la otra zona de edificios de alojamiento para estudiantes. Me pasé toda la mañana empacando las pertenencias de mi amiga suiza porque ya no pudo regresar a recoger sus cosas antes de que acabara el contrato. Nada más me tomó como 3 horas revisar cada pequeño rincón de su cuarto y de la cocina. Según yo no eran tantas maletas ni bolsas, así que en el primer viaje solo me llevé una bolsa y una maleta. En la tarde, los papás de mi homie #1 me ayudaron a llevar las demás maletas a nuestra nueva casa, donde las guardaré hasta que mi amiga pueda volver a Inglaterra para llevarse todo.
Entre las demás caminatas, una tarde fuimos al parque Weston, pasando por Crookes Valley park y luego de regreso por algunas callecitas. Nos tardamos como media hora, pero sí me cansé. Otro día fuimos a revisar a las abejas de la sociedad de Apicultura de la universidad. Principalmente fuimos a limpiar la casita de plástico (no sé como llamarla) donde guardan todo el material. Yo nada más fui a huir de las abejas a las que al parecer les caigo mal, y a detener el paraguas cuando llovía. Ya que andábamos por el área, caminamos alrededor de varios edificios de la universidad y descubrimos algunos jardines y más áreas verdes que nunca habíamos visto antes.
Otro día que fui solo con mi homie #1 a ver a las abejas, su mamá también nos acompañó y terminamos en su casa porque una abeja le picó en el dedo meñique, donde ya le habían picado antes, y se puso muy mal. Creo que fue más de nervios, pero su mano estaba muy hinchada y nos quedamos varias horas con sus papás para que la cuidaran un rato. Mientras a mí me tocó un sándwich tostado y un chocolate caliente. Lo malo fue que a mí me dio alergia por estar con sus gatos, así que al final del día su mamá estaba muerta de la risa porque mi homie estaba toda espantada con su mano vendada y yo no podía ver con tanta comezón que me dio en los ojos. Ese fue el día que pedimos las hamburguesas para sentirnos mejor.
La única caminata grande que hice con mis homies fue a Forge Dam. Hora y media caminando en medio del bosque y sí me morí. Lo bueno fue que alcanzamos a comprar un helado justo antes de que cerraran la tienda, pero no vuelvo a confiar en las distancias que me digan mis homies, y no lo vuelvo a hacer. Para un poco más de contexto, Forge Dam queda a las afueras de la ciudad, en una parte se pueden ver campos grandes con vacas y borregos, y si se camina un poco más de ahí se llega al Peak District, el área de bosque entre Sheffield y Manchester. O sea que sí está lejos. Para ir con más calma, decidimos subir la colina al área donde vivíamos antes, y caminamos por Bole Hills. Ya que andábamos por ahí también compramos una malteada como recompensa por el esfuerzo.
El día del cumpleaños de mi homie #1, mis dos homies salieron temprano para caminar con su familia a Forge Dam (porque yo dije que no lo volvería a hacer) y luego me iban a decir dónde verlos para cenar. Ya que empecé a caminar, y que llegué al parque de Endcliffe, 25 minutos más tarde de cuando dije que ya iba de salida, resultó que me habían ido a recoger a la casa. Al final los papás de mi homie me ahorraron la subida de como 20 minutos a su casa después del pequeño malentendido. De regreso, su mamá nos llevó en carro de regreso a la casa, con todos cansados y yo con la alergia de los gatos.
Finalmente, para aprovechar el calor (23 grados, nada más) y ya que mi homie #1 anda bien ocupada viendo a sus amigos ya que ya agarró más confianza para andar saliendo, por primera vez en meses salí yo solita al jardín botánico (que tampoco había visitado en mucho tiempo) para sentarme a leer y luego caminar de regreso para una siesta porque me dio sueño con el calor.

Otros
-Mi homie #2 me prestó su teclado por casi dos semanas, y estuve practicando casi todos los días que lo tuve. Me dio tiempo para acordarme de cómo tocar Miserable at Best de Mayday Parade completa, y de acordarme de otra canción que no había tocado desde la secundaria.
-Empecé a vender por internet los DVDs de películas que ya están en Netflix y que ya vi con mis homies, porque tampoco me los puedo llevar a México porque la región es diferente y no sirven allá. Además de que estoy ganando algunos centavitos.
-Los vecinos de la casa de al lado con el jardín pegado al nuestro regresaron como por dos días al parecer para recoger sus cosas y vaciar la casa, pero aprovecharon para hacer una fiesta muy ruidosa y para juntarse a tomar en el jardín. Fueron momentos molestos e incómodos, pero no los volvimos a ver.
-Intenté hacer una "diamond painting" que estuve guardando hasta que acabara todas mis tareas para dedicarme completamente a terminarlo y me duró poco más de una semana. Está divertido, aunque no sé que hacer con él ahora.
-Terminé el curso de Mitología Griega y Romana con un poco de atraso porque le di preferencia a los ensayos de la uni, y ahora empecé uno sobre literatura histórica con énfasis en brujería y guerras.
-Encontré Yakult en una tienda y estuve muy feliz porque no sabía que lo vendían en Inglaterra, a lo que mis homies contestaron con "ah, ¿no sabías?" Ellos que no me dicen nada.
-Me decoloré la mitad del cabello porque ya tenía las raíces de 10 centímetros, y una semana más tarde me volví a pintar de morado. A estas alturas ya se está decolorando un poco, pero se ve muy bien.
-Seguí dando clases de español, ya tengo más clientes, pero tuve que ponerlo en pausa en lo que me cambiaba de casa y me activaban el internet.
-Mi homie #2 se ha ido con su familia por más o menos un mes para aprovechar las vacaciones de su papá, si es que puede salir a algún lado. Así que por el momento quedamos mi homie #1 y yo. O yo, porque ella se la pasa en casa de sus papás excepto para dormir.

Quise agregar un espacio especial para los días más memorables desde junio, así que aquí están dos de los mejores días que he pasado en el encierro.
14 de junio
Después de la cena temática de los 50s con baile de rock n' roll incluido, di una clase de español y luego tomé un baño en la tina que puse en la agenda y avisé a mis homies para que no hubiera problema. Tuve una hora para relajarme leyendo, con música, velas, una mascarilla y una bath bomb. Para cerrar la noche, vimos la película The VVitch. Está interesante, pero en general fue un buen día.
26 de junio
Con un solazo y a 26 grados, me la pasé entrando y saliendo todo el día para refrescarme porque hacía demasiado calor. En la mañana puse una cobija en el pasto del jardín y mi homie #1 quiso sentarse conmigo. Después de un rato terminamos construyendo un fuerte de cobijas para taparnos del sol. Con unas cuantas bebidas que según yo eran básicamente piñas coladas, nos quedamos un buen rato tiradas en el pasto, y mi homie #2 muy propio sentado en una silla, soportando el calor. Ese día acabé de leer The Curious Incident (...) y empecé a leer el manual contra zombies. Hasta me dio tiempo de tomar una siesta, y de hacernos una sesión de fotos en el fuerte. Es la segunda vez que salimos en una foto todos juntos. En la tarde, mientras yo esperaba el estreno de Parasite Eve, la canción más reciente de Bring Me The Horizon, nos visitó un gato llamado Iggy. Nos quedamos un buen rato acariciando a Iggy, jugando con un hilo, y haciendo lo posible por que se quedara un rato más. En la noche fui con mi homie #1 a Bole Hills para ver el atardecer y dar la vuelta por el parque.

Creo que escribí demasiado, pero no quería dividir este post para no tardarme más en publicarlo y tener que agregar lo que pase en lo que lo publico. En fin, en los próximos días escribiré exclusivamente sobre la mudanza y explicaré todo sobre ese tema. Pero para ya no ocupar más espacio, aquí me despido. ¡Hasta pronto!