11/7/18

LitUK: 26-31 de Mayo. Londres.

¡Hola! Ahora sí, este será el último post sobre los días de mayo. Se acerca el final, pero faltan muchas cosas antes. El único problema que tengo por el momento es pensar en una introducción, y aquí está. Espero que disfruten estas aventuras.

Mayo 26
¡Nuevo homie! Olvidé mencionar la llegada otro homie nuevo, el coreano, una semana antes, pero ahora sí voy a hablar del nuevo nuevo, LOL. Un joven poste tailandés de 18 años con estatura como de 1.90, jugador de basketball y fan de los Spurs. Tiene un acento medio extraño, pero se ve que es chistoso y fácil de molestar/engañar. Lástima que no vamos a compartir casa mucho tiempo. Y me cayó bien porque creyó que tenía 20 años. Es la primera vez que me ven mayor de lo que soy, y me emocioné.

Mayo 27
Todo el día anterior estuve descansando después de la loca noche de Prom para estar lista y tener suficiente energía para este día de escapada a Londres. Es la primera vez, y posiblemente la única, en la que fui a Londres en la mañana y regresé en la noche; excepto por la vez que fui con la escuela pero esa no cuenta tanto porque no iba por mi cuenta.
Pero bueno, fui porque necesitaba dar otra vuelta por Camden porque me gustó mucho y para comprar algunos souvenirs y regalos para mis papás, porque hasta el momento no había comprado absolutamente nada de recuerdo. Solamente compré una playera para mi papá y una para mí, una toalla de cocina para mi mamá, y pasé un buen rato caminando por el mercado. A diferencia de la vez anterior que fui, ahora había más puestos y tiendas abiertos, pero también había mucha más gente por todas partes y hacia demasiado calor. No estaba preparada para ese clima, y estuve sufriendo todo el día. Además, según el pronóstico iba a llover así que llevé mi impermeable. Cayeron tres gotas en la mañana y luego salió el sol. Hm.
Antes de pasar a Camden, y mi primer parada del día fue al Tate Modern, museo de arte moderno. Tenía pendiente ir desde la vez que fui al Parlamento con la escuela, porque por ir a Westminster me perdí el paseo al museo con mi grupo de Arte, pero no me podía partir en dos. Y como todos me dijeron, podía ir al Tate Modern cuando yo quisiera, pero no al Parlamento. Me tardé meses pero al fin fui, y es un gran museo. La entrada es gratis aunque hay algunas exposiciones para las que sí se tiene que pagar, pero se pueden ver obras muy interesantes por el gran precio de cero. Además el edificio está enorme y tiene mucho que ver.
Después de la vuelta al museo, me fui a un restaurante al que le había echado el ojo desde hacía tiempo pero que quedaba lejos de las zonas que había visitado. Fui a comer tacos al restaurante "El Pastor", aunque al final terminé pidiendo una gringa. Estuvo muy extraña porque la tortilla era triangular y la carne no estaba envuelta, más bien tenía presentación de tostada. Aún así, me la comí bien salvajemente; y fue más divertido porque unas chicas alemanas o algo así pidieron tacos y se los empezaron a comer con tenedor y cuchillo mientras yo devoraba mi gringa con la mano. Lamentablemente estaba caro, y un solo taco costaba alrededor de 5 libras (125 pesos, o sea). Por eso también quise probar algo más elaborado, y sirvió solo para quitarme el hambre un rato. Al menos la carne sí sabía como carne al pastor auténtica.
Siguiendo con mi recorrido, me dirigí a Kings Cross para volver a visitar la tienda de Harry Potter y comprarle una bufanda de Hufflepuff a una amiga (¡yay! Compañeras de casa), y luego caminé hasta el mercado de Camden; y ya saben que hice por ahí. Como todavía me quedaba mucho tiempo antes de que mi autobús saliera de regreso a mi pueblo, porque otra vez calculé mal la velocidad a la que paseo; fui a Hyde Park para matar el tiempo. Mi idea original era caminar por el parque, pero ya cuando llegué, y después de todo el día de andarme moviendo, lo último que quería era seguir caminando. Fui por un rico y caro helado a un café en medio del parque, y fui a buscar un lugar para sentarme en el pasto y leer un rato.
A poco tiempo de que saliera el autobús, o sea como 2 horas, ya me dirigí hacia la estación Victoria. Primero fui a la estación de trenes/metro para comprar de cena una pequeña hamburguesa de McDonalds con un súper cupón, y luego me fui a sentar a la estación de autobuses para esperar y esperar.
No sé por qué sigo comentando que las cosas son caras si estoy hablando de Londres. Todo en la ciudad es caro y punto. Y otra de las cosas que valen la pena mencionar de este día es que por fin compré la Oyster Card, la tarjeta para el transporte público de Londres, que solo cuesta 5 libras más lo que le quieras poner de "crédito". No la había comprado antes porque nada más no veía donde las vendían, y resultó que las vendían en una pequeña tienda dentro de la estación de autobuses que siempre ignoré. Tuve que esperar hasta mi última visita de la temporada, duh. Pero sí vale mucho la pena comprarla, las tarifas son más bajas con la tarjeta y cuando ya no la quieras se puede devolver y te regresan tus 5 libras; o también está la tarjeta para visitantes/turistas, que según yo la única diferencia es el color y que esa la puedes pedir por internet hasta tu casa donde sea que vivas. Y pues sí.

Mayo 28
Otra vez aproveché el día para ir a la playa ya que fue el segundo y último puente de todo el año escolar. También por eso me tomé un día para ir a Londres, porque me daba tiempo si ignoraba mis responsabilidades lo suficiente. Cosa que sí hice, hehe.
No me quedé en la playa porque hacía más calor del que esperaba (tanto que hasta salí en shorts) así que para refrescarme y escapar del sol, me metí a conocer el Arcade del muelle, o sea los juegos de maquinitas; y luego me fui a parar 15 minutos bajo el sol por un helado. Porque yo quería de ese helado. Para evitar desastres, me senté en el jardín a comer mi helado y disfrutar un poco el aire libre. Después fui a Burger King porque sigo teniendo cupones para hamburguesas y hay que aprovecharlos antes de que ya no sirvan. No hay que olvidar la condición de "estudihambre", jaja.

Mayo 31
Hubo demasiados plot twists el día de hoy. En cuanto al clima, amaneció con tanta neblina que parecía película de terror cuando abrí mi cortina. Nunca había visto el jardín tan gris, las otras veces no me daba cuenta de la neblina hasta que salía de la casa. Luego llovió no muy fuerte durante la mañana, y para la tarde ya estaba el solazo y hacía calor.
Durante la cena nos enteramos de que el nuevo homie coreano se va a mudar el domingo después de apenas semana y media, porque al parecer "no se puede adaptar a las reglas". Nos quedamos bastante confundidos sobre todo porque, de acuerdo al homie brasileño y a mí, tenemos amigos con muchas más reglas y restricciones en sus homestays, así que no sabemos bien cuál es el problema. Lo único que recuerdo que me preguntó los primeros días fue si 10 minutos eran suficientes para bañarse, y ya. Pero bueeeeno, cada quien.
La última sorpresa del día fue que me enteré de que el homie brasileño se iba este día, y casi lloré en el momento. Puso su colección de fotos del adiós en Instagram (y hasta me etiquetó) y un súper párrafo de despedida, pero pensé que se iba el día siguiente porque según había contado, tenía que estar en Londres antes del fin de semana y luego se iría de tour por Europa antes de regresar a su país y a su casa. Pero resultó que se va en jueves, y pues sí. Me dolió no haber sabido hasta el momento en el que estaban discutiendo la hora de llevarlo a la estación, y aún así me quedé muy confundida hasta que entendí qué estaba pasando. Ya me estoy cansando de las despedidas que sí han estado siendo dolorosas, y lo peor es que en poco tiempo me tocará a mí.

Esto es todo por hoy. Y pues sí. Esa es la frase oficial de este post, por si no se habían dado cuenta. Me está gustando tener tanto de qué escribir, y hasta ahorita me estoy arrepintiendo de no haber salido más todos los días que anduve en Inglaterra, LOL. Demasiado tarde, claramente; pero ya veremos qué sucede el próximo año. ¡Hasta pronto!