16/12/17

Living in the U.K.:Días 90-98

¡Última entrada de la temporada! Y ahora estoy muchísimo más emocionada por las vacaciones, ya verán por qué. Pero bueno... Sigamos con los últimos días de diciembre en Inglaterra y con las aventuras de la "Enrichment Week" que es la última semana de "clases" pero que básicamente es diversión y actividades extras. Así que después de los exámenes, sigue la diversión y luego viaje, ¡y con mucha emoción!

Día 90. 
El último examen, bendito día 90. Como dije anteriormente, que sea lo que Dios quiera. No espero más de un 75 y creo que andaré por ahí del 60, pero por el momento no me voy a preocupar.
Saliendo del examen, caminé hacia mi casa con otra amiga coreana y con su novio, coreano también. Incómodo. Y peor porque se la pasaban hablando coreano y solo una vez mi amiga me dijo "dice que deberíamos hablar en inglés" y siguieron en coreano. Lo chistoso del asunto es que ella nunca dice el nombre del novio, solo dice "lo voy a ir a ver", "estoy con él", "él me está esperando", etc. etc. Fuera de eso, sí la extraño. Antes caminaba con ella la mitad del camino a nuestras respectivas casas por lo menos una vez a la semana. Ahora siempre va a la residencia del novio y siento que ni hemos platicado últimamente... Aunque entiendo lo que se siente. Además dice que en su casa no prenden la calefacción y por eso se la pasa en la residencia de la escuela con él, LOL.
Entre otras cosas, a lo que todavía no me acostumbro es a siempre decir "cheers". Los ingleses dicen cheers para decir gracias, provecho, de nada, adiós... Es extraño, y no me sale porque no sé en qué momento decirlo. 
Para no volver a mi casa tan temprano, decidí salir a caminar a un parque que está a dos cuadras de mi casa pero que no había visitado antes enteramente por flojera de salir. Antes pasé por mi lunch y por un chocolatito caliente para calentar mis manos, y definitivamente funcionó.
Creo que no conocí ni la mitad del parque pero la parte buena es que vi muchos perros y por esa razón valió mucho la pena. También cayó una medio-nevada que parecía más lluvia pero sí era nieve, y ni siquiera duró más de 5 minutos. Mientras caía, ya iba de regreso a mi casa y con más razón salí corriendo, no sin antes grabar y tomar unas fotos (una de esas fue la que usé para estos últimos posts). Por más que me haya gustado ir al parque, estar adentro con calefacción es un sentimiento inigualable.

Día 91.
Mi homie italiano es muy ansioso y se la pasa moviéndose y comiéndose las uñas cuando platicamos después de la cena; pero sobretodo se la pasa viendo al reloj colgado en la pared de su lado derecho. Así que hoy mi host le puso un reloj enfrente de su lugar, recargado en la jarra de agua. Me morí de risa y con trabajos me pude aguantar mientras comía. Pero sí era una buena idea para que el homie no se lastime el cuello de tanto voltear.

Día 92. 
Se me está acabando el tiempo para elegir universidad y carrera y todavía no me puedo decidir. Entre otras cosas, hace demasiado frío para salir. Me quedé todo el día en la casa y apenas salí de mi cuarto. Y la comida que compré en el súper estuvo fea, no me gustó el sabor. Estará muy barata pero creo que sí vale la pena gastar un poquito en mejor comida.

Día 93. 
Excursión a Bath con la escuela, y me fui en modo turista al 100%. Nunca había visitado la ciudad, así que me fui junto con otros 3 amigos a una caminata guiada por un maestro para conocer el lugar, mientras todos los demás se iban de compras o por un café. Nosotros nos congelamos y nos tomamos muchas fotos, y después de hora y media nos separamos. Bueno, me volví a encontrar a mis amigos en Starbucks pero luego empecé mi aventura solita hacia el "Jane Austen Centre". Es una casita cerca de donde vivió Jane Austen en Bath, pero está arreglada muy bonita, y la entrada incluye una pequeña plática que explica muy bien el período de la vida de Jane Austen en esa ciudad. Me cayó bien la señora que dio la plática porque hablaba casi como si hubiera conocido a Jane en persona o como si fuera de su familia, con mucho entusiasmo y gusto. Dato cultural: es la escritora de Orgullo y Prejuicio, principalmente. Y me compré un pin que dice "I Love Bingley" porque pues sí, Team Bingley; y también hay vestidos y trajes para que te disfraces como una Bennett. Muy divertido. Después me fui a los Roman Baths (o baños romanos) que es la atracción turística más famosa de Bath. Es un balneario de aguas termales de los 1800s donde los romanos alguna vez hicieron "fiestas" y rituales, y donde iban a pasar el rato. El boleto incluye una audioguía que va contando pequeños datos en lo que caminas desde el balcón hasta llegar a la "alberca" principal. Es un pequeño pedazo de Italia en Inglaterra, con mucha historia que aprender de la arquitectura, las figuras, los símbolos y hasta de las monedas que usaban. Totalmente recomendado para visitar.
Al final del paseo me volví a encontrar a los amigos con los que fui a la caminata y los guié hasta el punto de encuentro para regresar a Bournemouth, porque andaban medio perdidos; y por eso me nombraron guía de turistas del año, LOL. Se les agradece. Lo único realmente malo del viaje, además del frío, fue que de regreso nos atoramos casi 2 horas en la carretera. De ida hicimos 2 horas y de regreso casi 4, que porque se cayó un árbol y cerraron todo.
Salimos de Bath a las 3:30 y estuvimos avanzando lentamente hasta como las 5, y solo llegamos a la mitad del camino. Luego, como a las 6, llegamos al punto donde estaba cerrado y el autobús tuvo que dar la vuelta e irse por otro lado. 40 minutos más tarde ya estábamos de regreso en el pueblo. Todos estábamos de dramáticos muriendo de hambre y de aburrimiento, pero al menos nos entretuvimos con la desesperación y el pánico.

Día 94. 
Hoy solo había clase para ayudarnos con nuestras aplicaciones a la universidad y a conseguir empleo. Casi nadie fue a la escuela, pero se perdieron de un rato muy divertido. Nos llevaron al teatro a ver una Pantomime (Pantomima) que es una obra de comedia normalmente para niños pero que incluye muchos pequeños detalles como chistes políticos y una lista de personajes que no pueden faltar sea la historia que sea. Siento que aunque no te guste mucho el teatro, esta fue una oportunidad para conocer un poco sobre la cultura inglesa, que muchos se perdieron y otros no supieron apreciar. Pero si me hicieron reír, especialmente cuando el villano cantó Look What You Made Me Do. Ni siquiera me gusta la canción, o Taylor Swift, pero sí me dio mucha risa.

Día 95. 
No sé porque hacer compras me cuesta tanto trabajo. Soy bien indecisa y por lo general termino malhumorada y cansada si no encuentro lo que andaba buscando... Pero ya tengo todo lo necesario para las vacaciones, y en vista de una muy afortunada situación, tendré que decir a donde me voy. 
Voy a recorrer unas cuantas ciudades de Europa, empezando por Perugia y Roma en Italia, que es uno de mis mayores sueños en la vida. La verdad es que en Perugia no hay tanto que hacer en la ciudad, pero quería ir ahí porque mi equipo favorito de volleyball es de esa ciudad y este domingo van a jugar contra otro de los mejores equipos de la liga, y en los dos lados hay jugadores que han participado en mundiales y hasta en las olimpiadas. El problema es que los boletos no se pueden comprar por internet fuera de Italia, y el partido está tan bueno que vi que se estaba acercando a ser sold out. Mi única salida era esperar a que el domingo todavía hubiera boletos para ese mismo día porque ese día llegaré a Perugia, pero estaba medio difícil. Así que con pánico porque ya no alcanzara boleto, le pedí por Twitter a mi jugador favorito de Sir Safety Perugia, Aleksandar Atanasijević de Serbia, que si me apartaba un boleto para el partido. ME CONTESTÓ Y ME DIJO QUE SÍ Y ME DIJO CÓMO RECOGER MI BOLETO. Ahora no sé como voy a aguantar la espera hasta el domingo cuando cumpla dos de mis sueños: ir a Italia y ver a mi equipo favorito jugar en su casa. ¡¡Ya no puedo esperar!! Creo que me voy a desmayar cuando vea a todos mis jugadores favoritos, porque ya estuve llorando de la emoción. Mientras, a hacer maleta.

Día 96.
Sigo llorando de la emoción y no se me va a olvidar. De verdad, lloré mientras caminaba a la escuela y mientras les contaba a mis amigas. Todavía no me lo puedo creer, ¡faltan sólo unos días! Y también estuve sonriendo todo el día, no me importó nada.
Además, salí a un bar porque había un evento de Pop-Punk y rock alternativo y toda esa música que me gusta, y no me lo podía perder. Estuve temblando todo el camino hacia el bar y luego mientras regresaba a mi casa, pero siento que valió la pena haber ido aunque sólo estuve ahí dos horas, pero me la pasé cantando felizmente. De nuevo, superando mi miedo a salir en la noche, y ahora sí fue en la noche/madrugada.

Día 97.
Último día de escuela, ¡YAY! Vimos una película que tenía ganas de ver desde hace tiempo, Elf, porque no la había visto antes. Muy payasa pero muy navideña, e hizo falta ese espíritu navideño. Hasta se me olvidó dos días antes decir que tuvimos un lunch navideño en la escuela con salchicha, pavo con salsa de arándano, papa, y un pastelito de postre; y también Christmas Crackers. No sé porqué me gustan tanto, pero fue divertido ver como nadie les agarraba la onda y no entendían cómo funcionaban. Una pequeña explicación: son cajitas que tienen adentro una corona de papel, un chiste y un juguete; pero lo divertido es que se trata de que, con otra persona, cada quién jale un lado, la cajita truena cuando se abre, y una persona se lleva el contenido. Como que a nadie le importó :( pero bueeno. Continuando con el último día, tuvimos una asamblea de casi hora y media para dar un montón de premios y certificados, y yo gané uno por más méritos en mi curso con 58 (dan méritos cada que haces algo bien, participas, ayudas, o cosas así) y uno por 100% de asistencia. *aplausos*. Y finalmente, fuimos libres. Apenas me despedí de mis amigos y me regresé a mi casita para empacar la maleta y dejar listos los últimos detalles del viaje. Falta tan poco tiempo que no sé cómo le voy a hacer para dormir en la noche.
¡Ah! y el homie italiano también se va, al mismo aeropuerto que yo pero él en la mañana y yo me voy en la noche. Con la diferencia de que yo regreso en tres semanas y él tiene que decidir si se pone a trabajar o si toma otro mes de curso de inglés. Decisiones difíciles, pero tal vez lo volveremos a ver en el pueblo.

Día 98.
Me voy en la noche después de cenar y no se porqué siento que me falta algo. Apenas le dije adiós a mi homie italiano y sólo estoy esperando a que pasen las horas hasta que sea mi turno de irme. No me siento totalmente preparada pero sí estoy muy emocionada, especialmente por el partido de mañana. ¡MAÑANA! Espero sobrevivir 3 semanas sin que nada me pase, y si lo logro voy a tener muchísimas historias que contar.
El plan para la noche es cenar, luego tomar un autobús de Bournemouth a Londres, luego uno de Londres a el aeropuerto, llegar como a media noche, y pasar la madrugada ahí esperando a subir al avión a las 7am. Voy a estar súper desvelada todo el día mañana, estoy segura. Pero valdrá la pena.

Ya tengo que dejar de escribir y terminar de alistar mis cosas para al fin irme de viaje. Creo que no voy a dejar de temblar de la emoción de todo hasta que regrese en 3 semanas, y eso es un largo tiempo. De verdad solo estoy viendo al reloj avanzar, porque por el momento no puedo hacer nada más. Nos vemos hasta enero, mientras tanto, feliz navidad y feliz año nuevo, y que se la pasen muy bien esta temporada. Gracias a todos los que leyeron mi blog este año y espero que hayan disfrutado y se hayan entretenido con mis aventuras y experiencias en estos meses de vivir en el extranjero. Todavía me queda mucho tiempo para vivir aquí, pero es momento de experimentar otro tipo de cosas en otro lugar. ¡Hasta enero!

13/12/17

Living in the U.K.: Días 81-89


Otro día de muchas historias, y ya falta menos para las vacaciones. ¡YAY! Disfruten de leer sobre mis aventuras en estas últimas semanas.

Día 81.
Terminé mi proyecto de arte. Creo que si fue exitoso aunque no quedó tan impresionante como esperaba. Pero me siento bien con el trabajo. La pintura de los objetos "basura" no quedó tan bien, la quería más brillante (neón) pero no había pintura así; y al final casi no resaltaron. Ah, pero el azul del mar quedó perfecto y me divertí usando muchísimos pinceles diferentes y para las siluetas usé una esponja chistosa. Creo que lo más importante fue esa parte, que me divertí haciéndolo en lugar de estresarme como todos los demás, hehe.
Hoy hizo más frío de ese frío que te hace querer quedarte en la cama todo el día, tomando ese chocolate caliente que todavía no compro. Por lo menos sí me la he pasado en la cama la mayoría del tiempo que no estoy en la escuela y además he estado viendo una película casi a diario.

Día 82.
Recuerdo perfectamente que me desperté a las 7, me quité la cobija, me volví a tapar porque hacía frío... Y desperté a las 8. JAJAJA. Todavía no lo supero y no sé porqué me da tanta risa. Tengo que estar en la escuela a las 8:30, y queda a 25 minutos caminando, así que normalmente salgo a las 8. Aha. Se me quitó el sueño del puro susto y me vestí en menos de 5 minutos. Salí corriendo con mi mochila a la cocina, agarré un pan (de sándwich), una galleta, tomé dos traguitos de agua; y a correr a la escuela. Llegué a la escuela casi en el mismo tiempo en el que llego diario, pero poquito después de las 8:30. No tuve ningún problema por esos minutitos y lo más importante fue que me di cuenta de que casi todos llegan tarde. Nunca me encuentro a nadie en el camino y hoy casi 10 minutos más tarde, me encontré a medio mundo caminando con toda tranquilidad mientras yo los rebasaba a toda velocidad.
Despertar tarde fue la primera razón para reírme en el día, pero hubo muchas otras y me la pasé riendo todo el día. Otra que recuerdo fue que al venezolano ahora estaba discutiendo sobre su clase de Economía y dijo algo como: "but I think, entonces you have to look...". Me da risa que no se dé cuenta cuando habla en Spanglish porque me estoy dando cuenta que pasa seguido y solo confunde a quien lo está escuchando.
Y la última noticia del día: comí calamar seco. CALAMAR, ugh. Resulta que es muy popular en Corea y además es la botana preferida de mi homie, así que su mamá le mando una bolsa de calamar seco, como beef jerky pero de calamar. Sabía a vil pescado seco, pero el sentimiento de un animal así pasando por mi garganta fue feo; y me da cosa solo de acordarme. 

Día 83.
Últimamente he estado bien perdida. Hace dos días (cuando sí desperté y sí desayuné bien) me acabé mi “spread” de Cadbury (como Nutella) y en lugar de tirar el frasco a la basura, lo regresé a la alacena. Lo vi hoy pero me acordé que estaba vacío y lo tiré. Y ayer se me olvidó sacar mi cepillo de dientes del baño así que hoy en la mañana me tuve que conformar con un chicle porque mi homie se estaba bañando. 
Entre las palabras más comunes de los coreanos se encuentran: maybe, wait, actually, y stupid; y me da mucha risa porque todos las dicen con el mismo tonito, como "maaybe" (tal vez). Esta es de las pocas cosas que no puedo explicar con palabras, necesito el sonido. Pero como no se puede, se lo pierden. Lo que no me gusta es que se repiten mucho "I'm so stupid" y cada que lo dicen me dan ganas de abrazar al coreano que lo dijo y decirle que no es estúpido... Luego recuerdo que hay una apariencia que mantener y que no puedo ir abrazando a la gente por la vida. Pero de verdad, algunos lo repiten mucho y me pone nerviosa que se hablen así de feo a sí mismos.

Día 84.
Mi primer noche fuera en el pueblo. Se puede decir que fue mi primer noche de adulta. No me había animado a salir en las tardes, sobre todo en esta temporada en que oscurece a las 4:30, y especialmente porque siempre ando sola. Pero ahora sí me animé a salir con una amiga coreana; fuimos a cenar y por un helado y caminamos a nuestras casas que quedan por el rumbo. Me asusté por el largo camino que recorrimos porque pasamos por calles demasiado oscuras y solitarias, aunque por lo menos no iba sola. Lo que me preocupó es que mi amiga seguido sale y seguido camina por ahí sola en la noche. Esto es muy nuevo para mí porque a mí nunca me hubieran dejado andar afuera sola en la Ciudad de México, aunque fuera a las 9 (que no es taaaan tarde para salir); y me cuesta mucho trabajo salir y andar como si nada porque no estoy (estaba) acostumbrada a salir sola en la noche, ni a salir en la noche en general.

Día 85.
Siento que ya no encuentro cosas que hacer que no incluyan comprar algo o simplemente gastar por gastar, y se supone que tengo que controlar mis gastos. Me la paso buscando ofertas pero compro un montón de cosas y así no funcionan los ahorros.

Día 86.
Fue mi primer examen "final" aunque solo de 3 meses de clases. Fue de "Data", o sea un poquito de matemáticas, estadística, y Excel. Resultó bastante fácil para mí y para mi amigo coreano con el que me siento en la clase (por algo será) pero muchos tuvieron problemas porque al parecer los demás maestros de la materia estuvieron faltando mucho y no explicaron bien los temas; y varios me dijeron que ni siquiera sabían de qué les estaba hablando el examen.
En fin... Después me colé en los planes de otro grupo de coreanos para ir a comer a un restaurante coreano y luego pasar un rato en la residencia de estudiantes en el centro. Fue un día bastante más coreano que de costumbre, especialmente por la comida. Fue divertido porque después de que llegamos nosotros al restaurante, llegaron otros 5 amigos y vimos a otros 4 coreanos en camino al mismo lugar.
Luego de la improvisada reunión me fui con otra amiga no tan cercana a la biblioteca de la universidad para "estudiar". Yo no llevaba mis notas aunque sí mi cuaderno y ella se la pasó jugando en su computadora. Me gustó la biblioteca pero queda un poco lejos de mi casa, así que no se si vale la pena salir hasta allá; además de que en mi casa hay más silencio... Aunque la caminata estuvo relajante. Tomé el mismo camino de cuando salí con mi amiga coreana y solo puedo decir que se ve muy diferente a las 4 de la tarde a comparación de a las 9.

Día 87.
Primera vez en un supermercado grande. ¿Porque me tardé tanto? Es igual que ir a un Wal-Mart, pero por alguna razón me tomé mi tiempo para decidir ir, y valió la pena porque sale bien barato. 
Resulta que mi host pasó años en Tailandia o algo así (ya se me olvidó) y que está más acostumbrado a usar tenedor y CUCHARA en lugar de tenedor y cuchillo. Aha. Lo estuve observando y sí, así como los mexicanos usamos la tortilla para todo (aunque claramente no para cortar), él usa la cuchara. Y yo nada más no me acostumbro y extraño tener una tortilla para empujar la comida. Si alguien gusta mandarme un kilo se lo agradecería mucho.

Día 88.
Segundo examen escrito y queda uno. Nada que contar, estuvo fácil así que seguramente paso de 80. Para referencia, los maestros dicen que un 60 en el primer período es un buen comienzo, así que 80 es digno de aplausos.
En otras noticias, visité McDonalds por primera vez aquí y resulta que todo está automático; hay como 6 pantallas touch para que elijas lo que quieras, y hasta se pueden "personalizar" los ingredientes y todo. Lo más curioso es que sólo había una cajera y todos los demás estaban en la cocina o despachando las órdenes, y una filota de gente esperando a que llamaran su orden.
Y en el proceso para superar mi miedo a salir en la noche (o en la oscuridad de las 5pm) salí a tomar una clase de baile. Había tenido las ganas desde hace tiempo pero no me animaba porque en el lugar que había visto, la clase era los lunes a las 8:30pm y con 25 minutos de mi casa en camión; pero hace unos días en una de mis caminatas encontré un estudio a tres cuadras de mi casa y una clase de Rock n' Roll los miércoles a las 7, y allá fui. Cuando salí, sólo salté dos veces: una cuando vi una sombra detrás de mí pero luego la persona cruzó la calle y yo di la vuelta; y otra cuando escuché la puerta de un coche siendo azotada. En cuanto a la clase, fue otra situación que me hizo pensar, ¿por qué me tardé tanto? Tenía dos días de haber encontrado esa academia, pero aún así, ¿por qué?
Hay que decir que sí me gustó la clase y que después de muchos intentos fallidos por mi cuenta, al fin aprendí a agarrarle el ritmo al Rock n' Roll y ya puedo bailar Johnny B. Goode con confianza, aunque repita los mismos tres pasos toda la canción. Y de pareja me tocó bailar con un universitario que me cayó muy bien, aunque al principio solo había visto un montón de parejas de viejitos. Lo bueno es que encontré a alguien más que iba sin pareja.

Día 89.
No me pude concentrar en estudiar en todo el día, así que para el último examen será lo que Dios quiera, LOL. De verdad me senté, me acomodé, abrí mis libros... Pero no pude mantener la atención en mis notas y en los datos, así que no sé como me va a ir mañana.
Hoy estuve todo el día en mi cuarto y cuando quise bajar a calentar mi lunch del súper en el microondas, escuché que había visita. Esperé como media hora y bajé creyendo que ya no había nadie, pero resultó que la visita había ido al baño. La parte buena fue que me ayudaron a ver cómo calentar la comida, porque han de saber que es la primera vez que preparo algo así, y creo que fue muy obvio para mi host y su hija. Luego estuve como 20 minutos comiendo incómodamente mientras ellos platicaban y tomaban su té (muy ingleses, claramente) y cuando acabé me volví a esconder en mi cuarto. Fueron momentos extraños, y la comida estuvo rara: pasta con tomate, pero por ser para congelar y calentar en microondas, no tiene el mejor sabor.

Como notarán, estos días en específico hice muchas cosas por primera vez, y creo que es importante remarcarlas. Al fin estoy aprendiendo, tres meses más tarde pero al fin. Especialmente por la primera vez que me quedo dormida antes de ir a la escuela, jajaja. Esperemos que los siguientes 6 meses sean más fáciles y menos fríos. Ahora sí, nos vemos en unos días para el último post de este primer período viviendo en Inglaterra. ¡Hasta pronto!

10/12/17

Living in the U.K.: Días 71-80

Estos últimos posts antes de mis vacaciones de invierno van a ser ligeramente mucho más largos de lo normal, en vista de que quiero terminar de escribir mis aventuras de estos primeros meses lo más pronto posible. Así que disfruten el doble de historias:

Día 71.
Ha sido el fin de semana menos productivo desde que estoy aquí. No hice absolutamente NADA de tarea. Bueno, sí escribí un ensayo pero porque era para el lunes. Y ya. No adelanté ningún otro trabajo y ni siquiera se qué estuve haciendo todo el tiempo. La parte buena es que me siento muy descansada y tranquila.

Día 72.
No pude dormir bien la noche anterior y todo el día estuve con los ojos medio abiertos y con ganas de morir. La otra cosa es que ya está empezando a oscurecer como a las 4:20, y me da cosa que mis clases terminan a las 4:30 y para cuando llego a mi casa, a las 5, ya parecen las 9 de la noche.
Y este día me sentía muy mal, cansada y con dolor de panza. Me tomé una pequeña siesta justo después de llegar de la escuela y por suerte estuve suficientemente consciente para poner una alarma a las 6:25 y estar a tiempo para la cena. Aún así estuve toda adormilada y callada, y antes de bajar a cenar, me tiré en el tapete y morí hecha bolita. No sé porqué me sentía tan mal, pero no mejoró pronto.

Día 73.
El segundo día en el que mi alarma no me despierta. Y esta vez la segunda ronda de la alarma tampoco sirvió. Me desperté casi 7:10, pero es a la hora a la que normalmente me levanto de la cama, así que estuvo bien.
Noté que mis maestros son bastante sarcásticos y es una razón más para que me caigan bien. Pero conviviendo todo el día con ellos, no sé cómo esperan que sea comprehensiva y paciente en lugar de recurrir al sarcasmo igual que ellos.
En otras noticias, ¡los boletos del cine están bien caros! Quería ir a ver La Liga de la Justicia, pero ya con descuento de estudiante, los boletos están en como 9.5 libras. Eso equivale a más de 230 pesos, y ni siquiera es VIP o algo parecido. ¿¡Qué les pasa!? Así nunca voy a ir al cine aquí. :( Y además me faltarían las palomitas o alguna botana, si no no se puede.

Día 74.
Una cosa que ya había notado pero de lo que no había hablado: On Wednesdays we wear leggings and a hoodie. Efectivamente, los miércoles son los días oficiales en los que la mayoría de chicas usamos leggings y una sudadera. No sé porqué pero especialmente lo noto con mis 3 compañeras de Arte, y parece que nos ponemos de acuerdo. Y ya van varias veces, que es lo más extraño.
La hora de la cena normalmente es cuando más me rio en todo el día, pero solamente cuando está el homie coreano. Si no, acabamos de platicar rápido y apenas hacemos unos cuantos comentarios antes de irnos. Definitivamente hace falta el homie, pero es el que más sale de nosotros; excluyendo al homie árabe que ni siquiera pisa la casa en todo el día.

Día 75.
Los homies bien princesos me han estado ganando el baño y se tardan media hora en bañarse mientras que yo me tardo 15 minutos, máximo 20. Igual en las mañanas, soy la que necesita salir más temprano y aún así se toman su tiempo. Necesitamos ponernos de acuerdo, porque así no está funcionando. O necesitamos un baño más.

Día 76.
He estado comiendo cosas que nunca antes hubiera aceptado. Yema de huevo, coliflor, pimiento que solo comía en tacos de alambre con queso... Lo único que sí no soy capaz de comer son champiñones ni coles de bruselas; saben feo. No le he dicho a mi mamá todo lo que he estado comiendo sin quejarme, y no me imagino qué me diría. No creo que se enoje, más bien creo que se sorprendería porque de verdad ni siquiera me gustan esas cosas pero aún así no me he quejado. 
Hoy fue mi onceava visita a Tealith, así que mi té salió gratis gracias a la tarjeta de lealtad. ¡Yay! Aproveché para tomar mi combinación favorita de Nuttea con té de jazmín y bolitas de fresa. Pensé que sería mi último té de la temporada y estaba preparada para decir que no quería otra tarjeta, pero ni me preguntaron y me dieron una nueva que caduca en enero. De todos modos creo que voy a dejar de tomar tés ya que mis manos se congelan demasiado con ellos, y además están un poquito caros. Y con las tres semanas de vacaciones, creo que no va a ser posible que complete las 11 visitas para otro té gratis.

Día 77.
Sigo confundiendo Subway con Underground. Recordemos que el Subway, además de restaurante de sandwiches, es el paso peatonal pero por abajo de la calle. Ya estoy aprendiendo que si no hay un paso peatonal cerca, es porque por alguna parte hay un "subway", pero se me olvida.
Fui de paseo a Poole, un poquito de compras, pero principalmente con otro propósito. Compré un diario para viajes llamado "Travelogue" que incluye mapas para que marques los países que has visitado. Por el momento mis mapas están algo vacíos, pero próximamente marcaré unos cuantos lugares. Tambien, ¡por fin compré una bola 8! Era uno de mis "sueños" de la infancia era tener una de esas para preguntarle qué hacer con mi vida, y al fin puedo hacerlo. Compré una chamarra bien gorda para el invierno y para mis vacaciones, y de verdad espero sobrevivir con ella.
Pero la verdadera razón por la que fui a Poole fue para ver Loving Vincent. Creo que en español se llama "Las Cartas de Van Gogh" o algo así, lo cual me parece un gran spoiler, pero bueno. Estuve llorando toda la película, casi desde que empezó. No sé porqué me pongo tan sensible cuando escucho sobre Van Gogh, pero de verdad es mi pintor favorito y siento muy feo viendo lo mal que lo trataban. Si están pensando en ir a verla, aprovechen. Está buenísima y además se nota todo el esfuerzo que pusieron en hacer la película. Por si no lo han escuchado, está hecha totalmente por pinturas; cada cuadro fue pintado a mano. De verdad las pinturas están hermosas, y además la película es un pequeño juego de "descubre la pintura de Van Gogh" porque ocupan algunos cuadros famosos para las escenas y para los personajes de la película. En fin, de verdad vayan a verla, vale totalmente la pena.
Y el boleto me costó solo 6 libras, mucho menos que la Liga de la Justicia; aunque tuve que ir al pueblo de al lado a un cine todo artístico y con puros viejitos en el público. Y tampoco hubo palomitas porque la tienda estaba cerrada cuando llegué. Bu. Pero la película tiene calificación de 10000 de 10.

Día 78.
El homie italiano anda demasiado callado, más que yo y eso es raro. De verdad, no habla para nada en la cena y no convive. Mientras tanto, el homie coreano y yo platicamos como si fuéramos súper amigos.

Día 79.
Acabo de entender que falta una semana para los exámenes "finales" y definitivamente todavía no estoy lista.
También me di cuenta de que a veces se me olvida que vivo en una ciudad de playa. Ahora se lo que se siente cuando creía que mis amigos de Cancún se iban a la playa diario. Ya entiendo que fue un grave error y sobre todo un gran prejuicio. Así que, conclusión: vivir cerca de la playa no significa vivir EN la playa.

Día 80.
Fue el primer día del examen de arte. O sea, no es examen como tal, mas bien son 3 horas en dos días para hacer un proyecto. Las clases de la semana anterior habían sido especialmente para planear y preparar todo, pero definitivamente no estuve preparada. Mi idea original era usar una base de madera o algo así y sobre ella pintar el mar con tonos de azul claro; sobre esto, pintar la silueta de animales u objetos naturales, y además hacer figuras de yeso de basura. Cabe aclarar que la temática era "objetos que encuentras en la playa", y la mayoría de nosotros hizo algo relacionado con la contaminación del mar. Pero bueno, todo falló con que no sabía cómo pegar las figuras de yeso (que había hecho antes) a la base, así que la idea de la maestra fue hacer la base de yeso y enterrar las figuras. Digamos que no resultó tan mal, pero me pasé al menos 2.5 horas esperando a que se secara la base. Así que no pude hacer nada más, y prácticamente no hice nada. Puedo catalogar el proyecto como un absoluto fail, al menos por este día.
Y otro resultado del día fueron mis manos llenas de yeso. Hasta me quedó en las uñas y de verdad no se quita. Peor tantito con tanto frío que está haciendo últimamente, porque mis manos se congelan y me cuesta más trabajo hacer cualquier cosa que implique hacer movimientos complicados o exactos con las manos, básicamente.
Entre otras cosas, ya le estoy agarrando mucha confianza a mi homie coreano para bromear con él pero siento que excluyo al homie italiano. También es su culpa por no integrarse a las pláticas, pero sí siento feo.

Y pues sí. Espero que se entretengan un buen rato con los relatos de todos estos días. Esta semana voy a estar trabajando mucho para publicar los posts antes de tomarme un gran descanso de todo el internet en general (principalmente con el fin de ahorrar batería) pero de eso ya hablaré más tarde. Mientras tanto, esperen más posts en los próximos días, y ahora sí no son sólo promesas. ¡Hasta pronto!

8/12/17

Living in the U.K.: Días 66-70

Después de acabar la temporada de exámenes, llegamos a ese punto pre-vacaciones en el que ya no tengo absolutamente nada que hacer; así que me puedo dedicar a escribir. Disfruten estas pequeñas historias de hace unos días llenas de cansancio y mal humor (por el cansancio).

Día 66. 
Mi cabello se está cayendo como nieve en invierno en Canadá. O sea mucho. Gracias estrés, aunque tal vez (tal vez) sea el shampoo. Prefiero echarle la culpa al estrés. 
Hoy no me senté con los coreanos, ellos se sentaron conmigo. Que quede claro: yo llegué primero, dejé mi mochila, fui a comprar mi lunch, regresé y ya estaban sentados en la mesa. Justo cuando iba a aplicar el protocolo “hablar en francés o italiano para excluirlos a ellos en lugar de que me excluyan”. Pero lo arruinaron incluyéndome en la conversación. Así no se puede. 
Por el lado negativo de la vida, ya no soporto la clase de “Data” (control de información). Fuera de la materia, me cae mal la maestra y sus comentarios “chistosos” y además pierde muchísimo tiempo en clase con “voy por mi laptop, voy por un papel, voy por la engrapadora...”. Y no soy a la única a la que desespera, mi compañero coreano también pone una cara de aburrimiento que hasta me da risa. Además, todos asumen que vamos a necesitar matemáticas en la universidad y me dan ganas de gritarles “NO, POR ESO ELEGÍ UNA CARRERA DE HUMANIDADES”. 

Día 67. 
¿Qué fregados tengo? Van dos días que siento que todos se me quedan viendo. Sí es normal y ya estoy acostumbrada a que de vez en cuando me vean raro, pero en este pueblo ya me conocen. ¿Qué tengo para ver? Además de esto, los días se me están pasando muy lentamente, pero siento que las semanas se me están acabando y ya casi se acaba el "semestre". 

Día 68.
El primer día que mi despertador no me despierta, aunque me desperté yo solita 4 minutos más tarde después de escuchar el despertador entre sueños. Pero estaba tan cansada que solo quería gritar: MÁTENMEEEEE.
He decidido que a partir de mi regreso de vacaciones de navidad en las que no voy a estar en Inglaterra (BTW, sorpresa), o sea cuando empiece el segundo "semestre", voy a escribir los posts por fecha en lugar de número de día viviendo en el extranjero; porque la cuenta ya se está poniendo confusa y además los números ya están muy grandes. Además se siente raro contar los días que llevas en un lugar, como llevando un código.
Por cierto, hoy fue el día en el que todo mundo notó mi sudadera de Hufflepuff. Apenas. Y eso que la he usado antes. Un compañero me preguntó por ella y también el señor que sirve la comida en la cafetería. Fue un momento incómodo y extraño, porque había más gente en la fila detrás de mí.

Día 69.
Sigo pensando que es octubre y escribo "10" como el mes. ¿Cómo es posible? Ya casi va medio noviembre y no me puedo aprender la fecha. Pero bueno, hoy fue un día bonito y soleado, todo inspirador y alegre. La verdad es que fue un bien día. Empecé bien, cruzando la calle decentemente y ya con eso supe que sería un buen día. Trabajé bastante, así que fue muy productivo y rápido pero sin presión.
Entre las cosas que me dieron risa, a mi compañero venezolano se le salió un "o sea" a media discusión en la clase de Política. Me dio todavía más risa porque otro compañero chino lo notó pero claramente no entendió y solo se le quedó viendo con cara de ¿?. Pero el venezolano ni en cuenta.
La siguiente noticia es que mi súper agenda estuvo causando sensación. No se si lo había dicho pero desde que empezó el año he estado llevando un bullet journal totalmente diseñado a mano en un cuaderno punteado de hojas moradas. Hoy estuve haciendo más hojas para los próximos meses y mientras tanto mis amigos lo notaron y se sorprendieron mucho de los tipos de letra que hago y de todos los diseños de mi agenda. Tal vez luego la presuma por aquí, porque la verdad hay varias páginas que sí me han gustado mucho.
Lo último del día es que he comenzado la moda del bubble tea. Ahora resulta que varias tipas también van cada semana por su té, pero yo fui la que les dijo dónde estaba la tienda. Y yo soy la obsesionada con la tapioca, ¿ok? Y hablando de Tealith, no sé en qué momento dejé de probar y de anotar los sabores nuevos que probé, pero definitivamente es una prueba más de lo inconsistente que soy en la vida. Ayuda.

Día 70.
Salí a comprar botanas y más comida. Siento que me vi bien señora con mi bolsota reusable en el mini-súper, pero estoy en proceso de convertirme en adulta, así que está bien. Por lo menos disfruto de salir a caminar, porque al menos salgo. Me gusta estar adentro (calientita) y no salir en todo el día, pero también me gusta saber que puedo salir a caminar en cualquier momento, con el único propósito de caminar y ya. Como que siempre quise tener ese "poder" pero en mi casa en México nunca me animé.

Eso es todo por el momento. Todavía les debo la reseña de All the Bright Places, pero no he tenido inspiración con los libros, así que esperaré un poco. Mientras tanto estoy buscando en qué ocuparme y pues así. Por cierto, decidí cambiar la foto de la sección en vista de que ya se está poniendo más frío el clima y pues así, también. Aunque no me gusta usar una selfie de tan cerca, es lo que se tiene; pero la foto anterior ya me había cansado. Ahora sí es todo, ¡nos vemos!

4/12/17

Living in the U.K.: Días 59-65

Continuamos con las historias de los días pasados en lo que pierdo el tiempo evitando estudiar. Por lo menos esto ya es algo productivo, no como ver películas o videos con el libro abierto enfrente de mí.

Día 59.
Tuve el salón de arte sólo para mí, y ni siquiera la maestra llegó. Hubo un examen de matemáticas especial y como todos en esa clase quieren ser arquitectos, todos toman la clase de matemáticas, menos yo. Y la maestra tuvo una emergencia así que no fue a la escuela. En resumen, todos los materiales y todo el espacio a mi disposición. Todo bien aprovechado.

Día 61.
Fue día de guerra contra puertas. En todo el día no fui capaz de abrir una sola puerta sin ayuda. Bueno sí, cuatro puertas: la de mi cuarto, la de la cocina, la del baño, y la de la casa. Pero en la escuela, NADA. Terminé con una cortada en un dedo porque no tengo bien claro cómo pero me aplasté la mano entre dos puertas y luego algo me rasguñó. Y después de eso, a empujar puertas con el hombro porque nada más no podía con ellas. Estuve en plan damisela en peligro, contra las puertas. Y tengo un curita casi como anillo para recordar la dura batalla que luché este día.
En otras noticias, cada día tenemos pláticas más largas en la cena y están bien divertidas. Los 3 homies que siempre estamos (porque el homie árabe nunca aparece) somos bien chistosos juntos. 

Día 62.
Después de toda la semana cargando mi laptop de martes a viernes, ya ni mis piernas querían reaccionar para caminar a la escuela en la mañana, y ni se diga el dolor de espalda. No sé cómo le voy a hacer si tengo que llevar mi laptop otra vez a la escuela, porque duele y cansa bastante.

Día 63.
Otro lazy day. Compré un wrap (burrito, pues) en Tesco (el Oxxo inglés) que según iba a apartar para el día siguiente, pero ganó la flojera y no salí en todo el día. Ni siquiera de mi cuarto, más que a desayunar y a cenar, y al baño que está a 5 pasos de mi puerta. El único ejercicio que hago dentro de la casa es subir y bajar escaleras, y eso ya es mucho comparado con mi casa de un solo nivel en México.

Día 64.
Salí a comprar helado, y debido al precio, ese fue mi lunch. Estuvo muy bueno, de Cookie Dough y tenía pedazos de masa de galleta, claramente. Sí me gustó pero fue una mala idea. Para cuando llegué a mi casa, mis manos ya no respondían de lo congeladas que estaban, y no se cómo logré abrir la puerta con mis dedos todos insensibles. Lección del día: si voy a comer helado, que sea en un lugar cerrado y con calefacción, porque mis manos lo van a mantener frío. Y no, usar guantes no es una opción, porque lo más seguro es que se me ensucien y así no funcionan.
He estado tan estresada y cansada últimamente que sin querer me dormí como media hora en la tarde y desperté toda perdida sin saber quién era y dónde estaba. Se siente feo cuando te duermes sin querer, porque si lo piensas antes por lo menos sabes lo que estás haciendo, y no te apagas de la nada. Aunque por lo cansada que estaba, mas o menos me lo esperaba.

Día 65.
Tengo tanta tarea de arte y me deja tan estresada que ya ni reacciono cuando nos dan más. Solo me quedo con mi resting face y no doy señales de emoción alguna. Hm.
También, este día fue el "límite" para subir un ensayo importantísimo a Turn It In (porque es en lugar de hacer examen final de la materia). Yo bien responsable/nerd lo subí el día anterior en la mañana y este día pasé el lunch tranquilamente comiendo mientras todo mundo entraba en pánico tratando de subir el ensayo a la página saturada y/o terminando de escribirlo. Vale la pena adelantarse para vivir estos momentos desde el lado del espectador.
Y otra cosa importante este día, ¡vi a un zorro en el jardín! En la mañana mientras estaba abriendo mis cortinas, vi algo moviéndose y después de reconocerlo, me quedé como cinco minutos viéndolo fijamente hasta que se fue. Me emocioné un montón porque no sabía que había zorros en la zona pero resultó que es bien común creo que en todo el país y mis homies ya los habían visto antes en la ciudad. Me dijeron que también hay en Londres, pero normalmente salen en la noche. Aun así, a mí no me quitan la emoción: ¡vi a un zorro! Creo que nunca había visto uno fuera de un zoológico... ¡Y luego verlo en el jardín! Me emocioné, estaba bonito.

Pero bueno, un par de historias cortas para entretener un rato a quien sea que las quiera leer. Prometo buscar cosas más interesantes que hacer además de ir por helado y no salir de mi cuarto en todo el día. Por el momento ya salí más, y así tengo más cosas que contar, pero primero terminemos estos largos y cansados días. Por cierto, ¡feliz diciembre! Aprovechen para notar los cambios del blog. ¡Hasta pronto!