16/8/17

DED #3 Estampitas de fruta

Tuve que leer las entradas anteriores de Destroza Este Diario para saber qué había estado haciendo. Me di cuenta de que no recordaba absolutamente nada. Sobre todo, que había dicho que "haría una actividad diario" JAJA (no pasó). Pero ahora sí lo voy a retomar y, espero, terminar. Empezaremos con una actividad que terminé hace mucho tiempo, y no se porqué me tomó tanto tiempo escribir sobre ella si ni siquiera fue difícil. 

Ahora sí, las estampitas de fruta. Esta página fue divertida desde el principio. Cuando acababa de comprar el libro y lo estaba hojeando junto con un amigo, los dos dijimos "¿¿cómo que estampitas de fruta??" ya que lo primero que nos vino a la mente, o por lo menos a mí, fueron stickers con forma de frutas. Por suerte la página tenía un asterisco (que ya quedo sepultado bajo estampas) que decía "las estampas que vienen pegadas en las frutas cuando las compras" o algo así. Quiero creer que la instrucción principal se prestaba mucho para ser malinterpretada, y agradezco la aclaración.

Llenar la página también fue toda una aventura. Empecé quitándole las estampas a las frutas que tenía en mi casa. Creo que fue en la época en la que intentaba ser vegetariana, por lo que había muchas frutas en mi casa.
Pero mi principal fuente de estampas no fueron las frutas de mi casa. Mi amigo Toño seguido llevaba alguna fruta para el lunch, así que durante el primer y segundo año de prepa le pedía a él y a mis compañeros que veía comiendo alguna fruta que me regalaran las estampas. La mayoría me veía con muchísima confusión, y mi única explicación era: "es que las colecciono." Lo más divertido eran sus caras. La mayoría aceptaba, y después de un tiempo solitos me decían que si quería la estampa. Algunas las tuve que pegar con cinta porque el pegamento que traían ya no era suficiente después de esperar todo el día en mi estuche hasta que llegara a mi casa a pegarlas.
Un dato curioso que noté que lo que más consumían todos eran manzanas, por si a alguien le interesa.

Mucho tiempo después me olvidé del libro, como habrán notado; y mis compañeros también olvidaron mi colección. Pero llené la página bastante rápido gracias a su colaboración. Mi mamá todavía me daba las estampitas cuando ya la había terminado, y por eso tengo algunas en mi escritorio que nunca llegué a pegar. 
Pero bueno, esta actividad creo que es promoción para comer saludable y así acabarla pronto. Conmigo funcionó al revés; primero comía muy bien y luego pues, ya no.

Esto es todo por hoy. Realmente les recomiendo este libro, que aunque parezca para niños chiquitos, de alguna manera sirven para desconectarte de la realidad un rato y para hacer cosas diferentes.
Espero que les haya gustado esta corta entrada, y en el futuro trataré de escribir más sobre este diario. ¡Hasta pronto!