4/2/21

My Uni Life: Enero

¡Hola! Ya descansé lo suficiente entre mis tareas y el principio del siguiente semestre, así que antes de que empiece el trabajo en serio, les contaré cómo fue regresar a Inglaterra y lo que hice durante el período de exámenes. En caso de que no lo haya explicado antes, acá los exámenes del semestre de otoño son en enero, después de las vacaciones de Navidad. Está un poco mal planeado porque nadie trabaja en vacaciones, pero bueno, comencemos.

Salí de México la noche del 15 de enero, no sin antes comprar una botella de mezcal para mi reserva, y de disfrutar de un plato de nachos en la sala de espera VIP. El vuelo estuvo extrañamente corto, duró poco más de 9 horas, y ni siquiera había películas tan buenas. Lo bueno es que logré dormir más por aburrimiento que por sueño. Al bajar del avión, la persona que iba junto a mí tomó por equivocación mi botella porque había comprado una igual y se confundió, lo cual averigüé después de perseguirlo por el aeropuerto. Fue buen ejercicio después de estar casi 10 horas sentada.

Pasé casi 2 horas en la fila para revisar los pasaportes, y estaban deteniendo a mucha gente porque no llevaban un formulario obligatorio para entrar al país. Yo bien responsable llevaba hasta más documentos de los necesarios; como la prueba negativa de COVID que supuestamente me iban a pedir al hacer el check-in y que a nadie le importó. Al final sólo me pidieron pasaporte y visa para pasar como por mi casa. Los demás problemas vinieron después.

Hay una línea del metro directo del aeropuerto al centro de Londres y a la estación St. Pancras, que es donde salen los trenes hacia Sheffield. Lamentablemente no servía la línea, así que tuve que tomar un tren a la estación Paddington, luego tomar el metro por 2 estaciones en una línea y 2 en otra. Por ser bien precavida, compré el boleto de tren para las 5pm, por lo que todavía me quedó una hora para comer antes de la última parte del viaje. Solamente habían un par de tiendas abiertas dentro de la estación, y para no caminar de más, compré un burrito y algo de fruta. El tren tardó casi 2 horas exactas en llegar a Sheffield y ya de ahí solo me tomó 15 minutos llegar a tirarme a mi querida y fría camita para resucitar al día siguiente, con mis orejas bien adoloridas por llevar el cubrebocas por tanto tiempo y los brazos también adoloridos por empujar maletas.

Legalmente tuve que pasar 10 días en cuarentena, sin salir para nada de la casa. Mi homie #1 se quedó en nuestra casa durante las vacaciones, pero decidió quedarse con su familia mientras pasaban los 10 días. En preparación, ordené el equivalente a 2 semanas de comida online y también aproveché para comprar todo lo que normalmente me da flojera cargar desde la tienda como refrescos y un montón de comida congelada. Me pasé los primeros días de regreso limpiando la casa, desempacando, y organizando lo desempacado. Lo único de trabajo que hice fue asistir a la última junta de un trabajo en equipo nada más para asegurarnos que estaba terminado y luego entregarlo.

En cuanto a los demás trabajos, preferí pedir extensiones de las fechas límites para poder concentrarme bien en cada trabajo y porque no quería tener que preocuparme por las tareas cuando aún estaba en México. Además siempre me ponen todas las fechas de entrega en una misma semana, y pues así no se puede. De miércoles a viernes de la primera semana de regreso me dediqué completamente a escribir mi ensayo de "Prosa Romántica y Victoriana". Tenía que comparar 2 novelas y elegí libros que sí me gustaron y que ya había leído antes, por lo que ahora ya podría tener una maestría en Frankenstein y Alicia en el País de las Maravillas.

Para el ensayo de "Poesía etc." sí sufrí más. Primero tuve que terminar de ver los videos de las últimas clases del semestre que me faltaron, pero me tomé un par de días de descanso entre cada ensayo para que mi cerebro respirara. También fue más difícil porque el otro ensayo ya lo había planeado un poco y desde el principio supe sobre que libros quería escribir, pero me tardé más en elegir los poemas. Por cierto, ya debería tener otra maestría en Keats y en los sonetos, porque en el 95% de los ensayos que he tenido que escribir sobre poesía he hablado sobre algún soneto. Pasé el siguiente miércoles y jueves forzándome a escribir para acabarlo justo a tiempo, y lo mejor fue mi celebración cuando por fin lo acabé y entregué.

El primer día que salí después de mi cuarentena, salí a caminar y a recoger un libro a la biblioteca. Pasé por el parque Weston para saludar a los patos, y por suerte me tocó un día soleado. Aunque iba toda perdida porque no había sentido el aire fresco en 10 días y porque no había estado en la biblioteca desde como marzo del año pasado. Fuera de esa caminata, ni siquiera sentí que se me hubiera acabado la cuarentena porque no tenía a qué salir más que por comida, y eso solo es dos veces a la semana.

Estas dos semanas más de "vacaciones" me las he pasado entretenida principalmente trabajando en un proyecto llamado Latinx Connections que también he estado promocionando por todos lados. Lo primero que hice fue diseñar el logo a mediados de diciembre, y últimamente he dedicado días completos a hacer todas las imágenes que se publican en redes para adelantar trabajo antes de que empiece el semestre. Si les interesa, aquí les dejo el website para que vean todos los eventos que tendremos a partir del 15 de febrero.

Entre otros proyectos y actividades, comencé un curso de escritura creativa de 6 semanas con una organización local, y los temas han estado muy interesantes aunque la mayoría de asistentes son bastante más adultos que yo y por lo tanto con mucha más experiencia escribiendo. Han sido muy amables y creo que no lo he hecho tan mal, pero todavía me da pena compartir lo que escribo. Claramente el blog no cuenta. También volví a dar clases de español, sólo una vez por semana, pero ha estado divertido y la verdad lo disfruto mucho porque se siente más como una conversación que una clase como tal. Y para terminar, un amigo de prepa me convenció de hacer un reto de ejercicio de 21 días. Me estoy arrepintiendo un poco pero se siente bastante bien moverme, especialmente los días que estuve sin salir. Sí hay días en los que quedo tan adolorida que me cuesta levantarme o bajar las escaleras, pero duele bonito de saber que está valiendo la pena el esfuerzo.

En cuanto a películas, series, podcasts, y demás, me adueñé de la tele y la sala mientras mis homies no estaban, pero como el DVD murió, solo pude ver el programa de trivia The Chase (porque es el único programa inglés que reconozco además de las noticias) y pasar horas escuchando Kerrang! Radio que no se porqué razón se puede "ver" en la tele. Un día sí me vi con suerte y encontré Fantastic Beasts 2 que había querido ver desde hace tiempo. Honestamente me gustó más la primera. Extrañamente he tenido ganas de ver documentales, así que vi uno sobre la historia de los cassettes que anunciaron en House of Vans London; y también vi Rompan Todo, el documental de Netflix sobre rock latinoamericano, 100% recomendado. Mi amigo #1 siempre me recomienda muchas series y me enseña  el primer episodio pero aunque me gustan nunca más las sigo viendo, aunque hace poco me enseño El Ministerio del Tiempo y posiblemente trate de continuarla. Es sobre viajes en el tiempo, estilo Doctor Who en combinación con The Umbrella Academy y Monsters Inc., pero española. No explicaré las razones de estas comparaciones, solo véanla y entenderán.

Mi homie #2 regresó hace ya casi una semana y ha estado de muy buen humor. Llegó directo a limpiar y a poner orden, aunque según yo, no estaba tan mal. Ya veremos cómo nos va ya que empiece el semestre y que vuelva mi homie #1.

Me ha tocado un solo día de nieve desde que llegué, pero lo disfruté como pude. Di una vuelta al mini-jardín y usé como excusa que tenía que recoger un pedido de la tienda (para no pagar el envío completo a domicilio, solo tenía que cruzar la calle) para salir. Me gusta mucho pisar la nieve, aunque no me animé a sentarme directamente en el jardín para hacer angelitos de nieve. Pude haber ido al parque, pero me dio mucha flojera y además así no me congelé. 

Tengo que admitir que me pegó un poco la soledad y el frío en cuanto llegué, pero ya me volví a medio adaptar. Se sigue sintiendo feo, pero creo que va a seguir nevando y eso me alegra bastante. Además ya me voy a ocupar con tantas cosas en las que me metí para este semestre, así que espero no morir en el intento. Mientras tanto por favor recen por que encuentre un trabajo durante el verano porque estoy a varios meses de graduarme y sigo sin saber qué pasará después.

Ahora estoy evitando empezar a leer lo que tengo que estudiar la primera semana de clases, pero aún tengo tiempo para eso. Hasta ahora el Superbowl ha sido la marca del inicio oficial del semestre, aunque este año no tengo clases los lunes así que tendré tiempo para reponerme de la desvelada. En fin, con esto me despido y si todo sale bien, ya reportaré cómo me va con mis nuevas materias la próxima semana. ¡Hasta pronto!

12/1/21

My Uni Life: 5.10

¡Hola! Por fin hoy acabaré de contar todo lo que hice durante el quinto semestre a pesar de que en realidad duró 12 semanas, pero ya sabrán por qué mi rutina se vio interrumpida y por cosas del destino ya no me conecté para ver mis clases. Pero bueno, comencemos.

Lunes. Me pasé la mañana pintándome el cabello porque ya se había decolorado demasiado y quería que se viera bien para esta semana. Compré un tinte rosa con la intención de que se me pintara de un tono más claro, pero quedó más violeta que morado. Aún así se vio bastante bien.

Martes. Tuve mis últimas clases presenciales del semestre en la mañana por la iniciativa del gobierno para permitir que los estudiantes universitarios pudieran regresar a sus casas para las vacaciones de diciembre. Dieron solo como 10 días para que todos los que quisieran y pudieran viajar lo hicieran, y las universidades tenían que dar las clases restantes por internet. El resto del día me la pasé adelantando trabajo y viendo videos de clases, y en la noche de nuevo me puse una mascarilla para relajarme y luego empecé los festejos ya que estuve libre de responsabilidades para esta semana.

Miércoles. Me quedé toda la mañana descansando y luego estuve preparándome para la fiesta en la noche para celebrar mi cumpleaños y el de mi amigo #1, aunque él es un año menor. Primero fuimos a comer los dos; pasamos por un plato de comida china y luego nos sentamos en el parque del centro porque solo se podía pedir comida para llevar. Llegué un poco tarde porque iba cargando un par de botellas de alcohol y además se me ocurrió ponerme mis súper botas de tacón hasta la rodilla solo para lucirme. Fue mala idea considerando la distancia que caminé, pero hay que admitir que sí me veía muy bien, y sí me tropecé pero al menos no me caí. Después de comer, mi amigo me dejó congelándome en el parque en lo que iba a recoger a otra amiga, todo por un pequeño error de comunicación y de logística. Ya que regresaron, apenas pude mover las piernas para caminar hasta la casa de mi amigo. Pasamos un buen rato con música, botanas, y bebidas junto a las homies de mi amigo.

Jueves. Me pasé la mañana recuperándome de la desvelada y sin hacer nada productivo. Después decidí que no podía quedarme acostada todo el día así que por lo menos lavé mi ropa y cociné un buen salmón para cenar.

Viernes. Nevó un poco en la mañana pero para cuando salí después de mediodía ya no era más que una lluvia ligera y pronto se detuvo. Fui a hacerme la "prueba rápida" de COVID como precaución antes de viajar, aunque no supe si lo hice bien porque solo te dan el palito para picarte la nariz, un espejo, y un póster con las instrucciones. Me dijeron que tardarían 2 horas en mandarme un mensaje con el resultado pero estuve esperando todo el día y nunca me llegó nada. Espero que eso signifique que di negativo porque si no, creo que es un muy mal sistema. Al llegar a mi casa tuve la primera junta con mi equipo para el único proyecto en equipo que he tenido en toda la carrera, y espero que sea el primero y último. Hasta el momento el proyecto va bien, pero ya veremos cómo se pone todo. Me pasé la tarde empacando y limpiando mi cuarto. Al parecer se me han perdido varias prendas posiblemente desde la mudanza en julio, pero no hay tantos lugares a donde puedan haber ido así que espero encontrar todo cuando regrese.

Sábado. Terminé de empacar en la mañana y antes de tomar el tren a Londres fui a comer con mi amigo #1 a un café cerca de la estación. El lugar es muy hipster y la comida estaba algo extraña y cara, pero tenía tiempo que él había lo mencionado y ahora ya podemos decir que lo probamos. Luego fuimos por un café y chocolate caliente respectivamente para calentarnos luego de habernos sentado a comer en una banca afuera del restaurante. Finalmente me acompañó hasta el tren y me ayudó a cargar mi maleta todo el camino. Lamentablemente después de eso tuve que arreglármelas sola.  Ya en Londres, tomé un Uber desde la estación de Saint Pancras hasta el hotel cerca del aeropuerto de Heathrow, donde pasaría la noche para salir a tiempo para el vuelo en la mañana. Llegué justo a tiempo para una rica cena de chili con carne servida en un elegante tupper para comerlo en mi cuarto.

Domingo. Me desperté a las 8 sin necesidad de alarma y después de vestirme, bajé al lobby a recoger mi paquete de desayuno para volver a comer en mi cuarto. Me dirigí al aeropuerto a las 10 en un camión que pasa a varios hoteles de la zona, aunque solo se subió una persona más. Honestamente creí que el aeropuerto estaría más vacío, pero sí había bastante gente. No tardé mucho en pasar por seguridad, aunque me detuvieron porque se me olvidó vaciar mi botella de agua antes. Además resultó que mi maleta pesó 21 kilos, y como 15 de puros libros. El vuelo salió a las 12:45, y por suerte los 2 asientos junto a mí se quedaron vacíos. Luego de 3 horas de viaje ya me había desesperado, pero con las casi 11 horas de viaje me dio tiempo de ver Birds of Prey, el principio de Doctor Sleep que me aburrió, Joker, Jojo Rabbit, y Parasite. Siento que se me está olvidando una, pero no se si estoy contando la hora que pasé escuchando música y tratando de dormir sin lograrlo. Aterricé a las 6 de la tarde en la Ciudad de México, y mis papás me llevaron directo a cenar tacos al pastor para luego caer en mi camita.

Ahora saben por qué mi semestre estuvo más corto de lo normal, aunque eso no significa que ya no tuviera que trabajar. Tengo que admitir que ya no vi mis clases de literatura porque en el horario de México eran a las 6 y 7 de la mañana, y de verdad lo intenté pero mis horarios de sueño se vieron muy afectados. Tristemente la peor parte será en la temporada de exámenes en enero, y como todos mis trabajos son ensayos, significa que tengo que trabajar durante las vacaciones. No se si hacer un post especial para platicar cómo me fue en México, porque con alerta roja en la ciudad, la verdad es que no tuve oportunidad de salir mucho; pero disfruté y aproveché al máximo el sol y toda la comida mexicana que comí. 

No sé si escribiré más por lo menos hasta fin de mes cuando entregue todos mis trabajos pendientes, así que mientras tanto, suerte a todos los que ya entraron a clases o a aquellos a los que ya se les acabaron las vacaciones. Yo disfrutaré mis últimos días de tranquilidad y si todo sale bien, terminaré mis tareas lo mejor posible. Y pues sí. ¡Hasta luego!

3/1/21

My Uni Life: 5.9

¡Hola! Es tiempo de inaugurar los posts del 2021 con la penúltima semana del semestre que pasé en Sheffield, justo a tiempo para tomarme un break de escribir y concentrarme en la temporada de exámenes. Lo demás lo contaré a su debido tiempo. Pero bueno, ¡feliz año nuevo! Y ahora sí, comencemos.

Lunes. Pasé todo el día muriendo de frío a pesar de que no salí de mi casa (o de mi cama). En lugar de la clase normal del día, hubo una plática especial con una invitada, pero duró el doble de lo normal y ni siquiera recuerdo de qué se trató la última media hora.

Martes. Fui a otra caminata por un cafecito de Starbucks y a sentarme un rato en Weston Park antes de mis clases, aunque para mi mala suerte empezó a llover un poco y me tuve que ir a sentar afuera de la universidad, en un espacio techado. Luego de mis clases, pasé a la tienda y me fui a meter a mi cama para calentarme.

Miércoles. Todo el día estuve viendo videos de clases, armando mi rompecabezas favorito de Los Muppets, y escribiendo un pequeño párrafo de reflexión sobre el evento al que asistí hace dos semanas para que lo puedan agregar a la lista oficial de mis actividades extracurriculares. También volví a conectarme a una clase de pilates online pero me rendí a la mitad porque parecía más yoga que pilates y a eso sí no le hago.

Jueves. Me pasé la mañana limpiando mi cuarto porque de nuevo fueron a tomar fotos en 360 de nuestra casa para promocionarla para el próximo año y para evitar que vengan posibles inquilinos a verla en persona. De cena me pedí una pizza de Pizza Hut porque tenía un descuento en Uber Eats y pues, ¿por qué no?

Viernes. Pasé la mayor parte del día escribiendo para el blog. En la tarde tuve otra junta de la sociedad de Salud Mental seguida por una junta para el proyecto en conjunto con otras sociedades latinoamericanas en el Reino Unido. Para desestresarme y quitarme los nervios por tanto hablar con extraños, me quedé tejiendo mientras veía un capítulo de The Umbrella Academy.

Sábado. Me quedé toda la mañana en mi camita escribiendo para el blog. Más tarde decidí ser responsable por un rato e hice un poco de tarea, y luego seguí viendo la primera temporada de The Umbrella Academy por segunda vez.

Domingo. Di otra vuelta al jardín botánico y de compras a Ecclesall Road por unos cuantos encargos. En la tarde empecé a empacar para mi próximo viaje (del cual el destino no debería ser sorpresa para nadie), principalmente porque no tenía nada más interesante que hacer. Claramente hacer tarea o adelantar trabajo no era una opción.

Creo que el Lockdown en invierno no se siente igual y ni siquiera puedo salir a los parques o sentarme en el jardín porque prefiero no congelarme si puedo evitarlo. Para actualizarlos en cuanto a la weighted blanket que me llegó la semana pasada, creo que ya me acostumbré al peso extra y sí me ha ayudado a dormir más profundamente y a moverme menos; pero siempre la quito cuando me acuesto de día y la vuelvo a acomodar en la noche. Ahora tender la cama se ha vuelto parte de mi ejercicio diario, y al parecer la súper cobija también funciona para fortalecer los músculos de las piernas y los brazos.

Ahora sí esto es todo por hoy, pero prometo que el próximo post va a estar mucho más interesante. Espero que hayan tenido un buen inicio de año, y para los que empiezan clases o tienen exámenes pronto, mucha suerte. En fin, ¡nos vemos!