¡Hola! Llegó la hora de relatar los eventos de la última semana del semestre, los días antes de salir de vacaciones que más bien ya se sentían como si fueran vacaciones. Una de las cosas raras de la universidad (que no se si sea solamente ésta, o si así funcione en Inglaterra) es que la temporada de exámenes es después de las vacaciones, y no antes. Por un lado, está bien no pasarte las fiestas decembrinas preocupado por tu calificación; pero por otro lado, te la tienes que pasar estudiando. O esa es la idea, pero siendo sinceros nadie hace nada de todos modos. En fin, vayamos con las actividades de esta semana.
El lunes tuve mi última clase de Escritura Creativa. Esta vez solamente nos pasamos el tiempo hablando sobre la evaluación, y resulta que me voy a pasar un largo rato escribiendo porque tengo que entregar una historia de 2,500 palabras y un análisis de 1,500 palabras. Ya sé qué historia voy a usar, pero la tengo que extender de 1,000 palabras y no sé cómo voy a hacer eso, pero lo voy a lograr. O eso espero.
En la noche, me reuní con mis flatmates para ver un capítulo de la serie Blackadder. Me sorprende que Rowan Atkinson salga en tantas series y películas, y que no se cansen de verlo hasta en la sopa. La serie está divertida, y es un buen lugar para aprender sobre cultura y palabras específicas del inglés británico.
En la noche, me reuní con mis flatmates para ver un capítulo de la serie Blackadder. Me sorprende que Rowan Atkinson salga en tantas series y películas, y que no se cansen de verlo hasta en la sopa. La serie está divertida, y es un buen lugar para aprender sobre cultura y palabras específicas del inglés británico.
El martes tuve mi última clase formal de francés. Regresando de vacaciones voy a presentar el examen escrito, pero no me preocupa tanto porque soy buenísima para las secciones de lectura en cualquier idioma. La parte de escribir no se me da tan mal.
En la tarde fuimos a nuestras primeras house viewings, visitas para ver casas en las que posiblemente viviremos el próximo año. Ya había hablado de esto con algunos de mis flatmates, y al final nos pusimos de acuerdo entre 4 (2 hombres y 2 mujeres) para buscar casas y hacer citas para ir a verlas en la semana. Iba a ser una semana pesada, porque ya no teníamos tiempo antes de las vacaciones. Pero al menos empezamos bien. Vimos unas casas que estaban algo lejos de nuestro actual lugar de residencia, y más lejos de la universidad de lo que estamos ahora, pero al menos nos llevaron en coche hasta las casas. Nos sentimos niños chiquitos todos hechos bola en el asiento de atrás. En cuanto a las casas, nos gustaron algunas pero no nos convencieron 100%. De todos modos todavía nos quedan muchas por ver.
Casi no salgo con mis flatmates porque cuando estamos juntos normalmente es en el departamento, pero este día me di cuenta de que me veo bien chistosa caminando con ellos porque me tengo que poner chamarra, bufanda, gorro, y guantes para aguantar el frío; cuando ellos apenas traen un abrigo o únicamente una sudadera. Pero no me importa, yo tengo frío.
En la noche nos reunimos para organizar las ideas de las casas que vimos en el día y para prepararnos para las siguientes. Y para descansar, vimos el capítulo de Blackadder de navidad. De verdad, ¿qué cosa tienen con Rowan Atkinson?
El jueves tuvimos más house viewings y nos la pasamos dando vueltas por la ciudad, caminando de una zona a otra. Por lo menos me dio algo que hacer para no quedarme todo el día encerrada, como el día anterior. El único problema es que no estoy tan acostumbrada a caminar como mis demás flatmates, además de que los hombres son bastante más altos y rápidos, y las subidas me cansan mucho. Pero logramos llegar a tiempo a todas nuestras citas y vimos varias casas que nos gustaron. De regreso, pasamos a perdernos un rato en el jardín botánico. Mi flatmate local nos dio un tour por el invernadero, donde hasta hay cactus y agave mexicanos y más plantas de todo el mundo. También fuimos al "bear pit", una mini-arena de pelea con una pequeña estatua de un oso de madera. Decidimos que si no encontramos una casa que nos convenza, podríamos quedarnos en el "bear pit", aunque tal vez haga frío, pero ahorraríamos en luz. Antes de salir del jardín, vimos a un pequeño petirrojo que nos dio un concierto antes de huir. Mi flatmate se emocionó mucho con eso y con el montón de ardillas que encontramos en el camino. Estilo Dug en Up!, "¡ardilla!".
Me pasé la tarde-noche preparándome para mi examen de francés del día siguiente, cosa que tal vez debí haber hecho antes, pero lo importante fue que lo hice.
El viernes temprano fui a mi examen de speaking. Por suerte me tocó el primer horario, a las 10. Estuvo meh. A veces termino pronunciando algunas palabras más en español que en francés, pero creo que no me fue tan mal.
Después de eso, escapé al centro para ir de compras de preparación para las vacaciones. Tuve que comprar una maleta de mano porque cuando vine a Sheffield, solo traje dos maletas grandes y una mochila, y no tenía nada para llevar al viaje y no tener que pagar por documentar. Conseguí una muy buena maleta, no de tela, y expansible. Lo interesante fue pasear por la ciudad y andar por la vida con una maleta recién comprada y casi vacía, porque también compré ropa térmica que pusieron dentro de la maleta para no darme bolsa. Ahora sí, oficialmente comenzaron las vacaciones.
Regresé al departamento justo a tiempo para ayudar a mis flatmates con nuestra "Christmas meal", o comida navideña, porque no pudimos hacer una cena por falta de tiempo. Cooperé con ensalada de manzana que creo que nadie probó, pero que conste que sí hice algo. Lo demás fue todo muy inglés. Pollo en vez de pavo porque era más fácil de cocinar, puré de papa, papa empanizada, "pigs in blankets", o puercos en sábanas (la traducción suena más chistosa), que son salchichas envueltas en tocino buenísimas por cierto; y verduras. Y no podían faltar los Christmas crackers. Quedó bastante bien, y unos aplausos a mi flatmate casi-escocés porque fue el que preparó la mayoría de cosas y la verdad es que cocina muy bien.
Lamentablemente lo tuvimos que dejar limpiando porque nos tuvimos que ir a ver más casas. Otra vez dimos vueltas por media ciudad y subimos y bajamos las colinas varias veces. Al menos pudimos disfrutar de una gran vista de la ciudad cuando bajamos de regreso a nuestro actual departamento.
Antes de llegar, uno de mis flatmates nos llevó a la biblioteca secreta del edificio de a lado. Al parecer, hay un gimnasio donde hay varias actividades y donde a veces veo gente jugando ping-pong. Fuimos a un cuarto con muchos libros que se veían bastante usados y viejos. Según él, cuando fue antes había gente estudiando ahí pero cuando entramos más bien parecía que no debíamos estar ahí. Estuvimos un rato burlándonos de la gente en las fotos generacionales que estaban en las paredes y recorriendo los 3 cuartos de biblioteca, para después salir corriendo porque uno de mis flatmates nos quería dejar encerrados. Encontré verdaderos tesoros, y salí con como 5 libros.
El sábado descansé de tanta caminata y tampoco tuve que salir a comprar comida para la semana porque ni siquiera voy a pasar tanto tiempo aquí. En la noche vimos la película de los Muppets Christmas Carol porque es tradición en la familia de mi flatmate, y acepto cualquier cosa que tenga que ver con los Muppets.
El último día que pasé en la ciudad fue el lunes. Tuvimos más house viewings de las casas que más nos habían gustado y terminamos con 2 favoritas. Caminamos por otra zona de la ciudad que no conocía y fuimos a varias charity shops, o sea tiendas que apoyan a caridades, porque al parecer mis flatmates se la pasan en ese tipo de tiendas pero yo nunca había entrado a una. Salí con un libro que decidí que me iba a llevar a mi viaje, y el DVD de Muppets en el Espacio porque mis flatmates nunca la han visto y está medio complicado mandarlo desde mi casa. Luego del shopping, fuimos por un lunch de fish and chips porque pues, ingleses. Para terminar el recorrido, fuimos a un súper y compré solo lo necesario para mi desayuno y botana del día siguiente. Regresamos justo a tiempo para decir adiós, revisar que todo estuviera en mi maleta, y salir corriendo a la estación de autobuses para empezar mi viaje. Fue un día demasiado activo.
Esas fueron todas las aventuras del primer semestre. Me costó trabajo ajustarme a la vida universitaria entre tantos ingleses, pero hice buenos amigos en el camino y tuve bastantes buenas y no tan buenas experiencias. Ya veremos cómo me va con las calificaciones y con las clases del segundo semestre, y con todo lo demás. Tal vez luego cuente un poco sobre mis vacaciones por el este de Europa, en donde visité Berlín, Praga, Austria y Budapest. Todo a su tiempo, porque al momento apenas me estoy organizando con mis nuevas materias. Deséenme suerte y, ¡nos vemos pronto!